El gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, se quitó la carga a su ministro de Seguridad por la violencia sistemática en Rosario. Luego de que un ataque a un centro de salud obligara al intendente rosarino Pablo Javkin a suspender una actividad oficial, Rubén Rimoldi se quedó en la cuerda floja.
No sólo por las críticas del mandatario, sino también por su gestión frente a la violencia que atraviesa la ciudad. En horas de la tarde del miércoles, ya se sabía que Perotti lo había quitado de su cargo. Había sido nombrado en agosto del 2022 como Ministro de Seguridad de Santa Fe.
En ese contexto y preocupó por una violencia que no frena, Perotti no dudó en reclamar mas ayuda del Gobierno Nacional. Fue entonces cuando Aníbal Fernández le salió al cruce. “Asombran las expresiones del Gobernador Omar Perotti que echó al ministro de Seguridad de Santa Fe y reclama ‘ayuda urgente del gobierno nacional'”, escribió en un primer posteo en redes sociales.
Y cerrado: “El gobierno Nacional no ha dejado de invertir fondos nacionales para ayudar a resolver el problema de la ciudad de Rosario que lleva 20 años. Los resultados están a la vista. No dejaremos de acompañar con soluciones, buscando revertir este presente que estremece “.
Asombran las expresiones del Gobernador Omar Perotti que echó al ministro de Seguridad de Santa Fe y reclama “ayuda urgente del gobierno nacional”.
(Sigue)https://t.co/Hr2gyMAJ4z— Aníbal Fernández (@FernandezAnibal) February 9, 2023
La respuesta fue acompañada por una imagen que graficaba el accionar de las fuerzas federales en Rosario en números, indicando un total de 2.010 procedimientos entre enero y diciembre de 2022, un 161% más que en 2021. El número de detenciones de acuerdo a la información de Fernández también aumentó un 256% y totalizó 2.077.
Quién será el reemplazo del ministro de Seguridad de Santa Fe
Expulsado Rimoldi de sus funciones, el lugar quedó vacante para que lo ocupe el secretario de la cartera, Claudio Brilloni, que además es un exgendarme.
Brilloni será el cuarto ministro del área de la administración actual. Marcelo Saín, que por unos meses fue parte del ministerio que conduce Aníbal Fernández, había sido el primero hasta marzo del 2021. Su sucesor, Jorge Lagna, estuvo entre marzo de ese año y agosto del 2022.
La calle en manos de los narcos
El presidente de la Corte Suprema de Justicia de Santa Fe, Daniel Erbetta, pidió “no naturalizar” la ola de inseguridad por la que atraviesa Rosario y vigilar por la necesidad de llevar adelante una reforma en la estructura policial. “Se ha perdido el control del territorio”, reconoció con crudeza.
“Aquí hay tres elementos, tres grandes actores: la policía, el Ministerio Público Fiscal y la Penitenciaría, en algunos de estos tres sectores hay más problemas que en otros”, siguió.
El juez se refirió a la pérdida del control del territorio en manos de bandas delictivas, que siguen enviando instrucciones aún desde la cárcel para organizar “balaceras, extorsiones y crímenes por encargo”, por lo que pidió “empezar a hacer algo”.
“Esto no va a cambiar si no se acepta el problema, si no se reconoce. Si no se asume, no voy a poder nunca pensar en una solución y a esto tiene que hacerlo la política”, expresó.
Para el presidente de la Corte Suprema provincial, Santa Fe requiere de “una reforma policial, revisar los reglamentos del sistema penitenciario, fortalecer el Ministerio Público Fiscal y esto demanda la intervención del Poder Ejecutivo, del Poder Judicial y fundamentalmente de la Legislatura de la provincia”.
“Creíamos que habíamos tocado fondo y pareciera que el fondo todavía no llega. Acá hay un problema grave, tenemos una disputa violenta por mercados que están totalmente desregulados. Por ejemplo, Hamburgo es el principal puerto de ingreso de la droga en Alemania y la policía lo sabe perfectamente, el mercado se regula y hay límites, ni muertos, ni financiamiento de la política con este dinero. Esa situación no se da en la ciudad de Rosario”, dijo.
Además, el magistrado habló sobre la creciente presencia del narcotráfico en toda la ciudad santafesina y de las dificultades de control por parte de las fuerzas de seguridad: “Hay mucha gente que trata de cumplir a conciencia con su deber, pero el problema son los niveles de autonomización y de atomización de la policía”.
Para finalizar, el titular de la Corte Suprema destacó que esta situación “requiere de un compromiso político y de los poderes públicos, que dejen por un momento las elecciones de lado, las especulaciones electorales, y que de una vez por todas nos sentemos a consensuar una estrategia sostenida en el tiempo”.