El presidente Néstor Kirchner asistió este lunes al mediodía a la reinauguración de la fábrica de cables Pirelli, en el barrio porteño de Mataderos. En la reaputura de persianas asistió como invitado Aníbal Ibarra, quien de esta manera volvió a mostrarse junto al Presidente.
Kirchner llegó junto a Ibarra al acto de inauguración, que comenzó con la bendición de un sacerdote y cerró con un discurso del Presidente.
Proveedora de empresas de telecomunicaciones, Pirelli había cerrado sus puertas hace dos años atrás en plena crisis, después de 70 años de actividad.
El acto estaba previsto para las 11:30, pero otro acto previo, de graduación de los oficiales de las Fuerzas Armadas en El Palomar, en el que el Presidente hizo un enfático discurso, demoró la presentación.
La planta en Mataderos, llamada "La Rosa", tuvo su primera inauguración en 1931. Pero hace dos años, con la crisis global del sector de telecomunicaciones, el grupo italiano suspendió sus actividades en el país, mientras mantenía sus instalaciones en Brasil, Inglaterra e Italia.
Según la firma, en la planta de Mataderos la reactivación será gradual y comenzará por la producción de cables de cobre para luego sumar los cables ópticos y, especialmente, los dedicados a conexiones de internet de alta velocidad. Según la firma, a plena capacidad, la planta puede producir más de 100.000 kilómetros de cable al mes, "cantidad con la que se podría abastecer holgadamente a todo el mercado argentino".
Ibarra tenía previsto asistir a esta inauguración con el Presidente hace un mes, pero la agenda de Kirchner retrasó el encuentro, por lo que el jefe porteño decidió esperar y volver a mostrarse junto al Jefe de Estado.