Pasada la fuerte discusión parlamentaria por el presupuesto, y la modificación de la fecha para las elecciones de Comunas, en la Legislatura porteña comenzó a hacerse visible otro tema que despierta fuertes enfrentamientos y debates, y moviliza numerosos intereses no tan visibles: los medicamentos de venta libre. Actualmente se encuentran en tratamiento varios proyectos vinculados a este tema, uno que propone prohibir la publicidad de aquellos medicamentos que no requieren prescripción médica, y otros vinculados a la venta de estos productos fuera de las farmacias.
En octubre de 2010 el Congreso Nacional sancionó la Ley 26567, la cual prohíbe la comercialización de medicamentos de venta libre fuera del ámbito de las farmacias, modificando el decreto firmado por Carlos Saúl Menem que autorizaba la venta de estos productos en diversos establecimientos (quioscos, supermercados, etc). ?A esta ley adhirió todo el país menos la Ciudad de Buenos Aires, fogoneada por la Cámara Argentina de Productores de Especialidades Medicinales de Venta Libre?, dijo a Noticias Urbanas, Luis Antún, director ejecutivo del Colegio de Farmacéuticos y Bioquímicos de la Ciudad de Buenos Aires.
?Hay dos proyectos que nos interesan, el más importante es la adhesión a la Ley Nacional de venta exclusiva en farmacias. El Gobierno de la Ciudad aún no ha adherido, la han tratado en la Comisión de Salud con despacho, en la Comisión de Desarrollo Económico aún no han tomado una decisión?, relató el farmacéutico.
Si bien la adhesión a la ley nacional cuenta con la firma de diversos sectores de la oposición, el bloque PRO presentó un proyecto sobre comercialización de medicamentos el cual en su artículo 4º plantea que ?la venta y despacho de especialidades medicinales denominadas de venta libre también estará permitida en Quioscos y Maxiquioscos (conforme capítulo 14 sección 4.2.14 del Código de Habilitaciones y demás legislación vigente) así como en otros establecimientos además de farmacias habilitadas, siempre y cuando cumplan con los requisitos para comercializar productos alimentarios para consumo humano?.
?Este proyecto se opone a la Ley Nacional y está promovido por la Cámara Argentina de Productores de Especialidades Medicinales de Venta Libre?, dijo Antún.
El debate sobre la comercialización en diversos establecimientos de medicamentos que no requieren receta médica no sólo se está dando en el ámbito legislativo. En la Justicia de la Ciudad también se está analizando el tema.
?Esta Cámara presentó un recurso de amparo que fue rechazado incluso por la Cámara en lo Contencioso Administrativo y Tributario, ratificando la vigencia de la ley. Pero también se presentó una quiosquera con el respaldo de esta Cámara y la jueza (Elena) Liberatori hizo lugar a este recurso aunque dejó expreso en sus fundamentos que la ley estaba vigente pero autorizaba a la quiosquera a vender medicamentos?, describió el representante de los farmacéuticos porteños.
Y agregó: ?En la Legislatura en lugar de adherir se intenta sacar una ley de farmacias, lo cual va a llevar mucho tiempo. La farmacia en sí, la autoriza la Nación, mientras que la habilitación como espacio físico la habilita la Ciudad. Nosotros aspiramos a una ley propia que regule nuestra actividad, pero antes se tiene que resolver el vacío legal que existe actualmente y acatar la ley nacional. Hoy estamos regidos por el control de la Nación, y por leyes nacionales, pero la Ciudad no ha adherido a la ley nacional. Para los quiosqueros está vigente la ley Caballo, y para nosotros la nacional?.
Otro de los proyectos que se encuentran en discusión en la Legislatura de la Ciudad también vinculado al tema es el que busca prohibir la publicidad de medicamentos de venta libre. Según el profesional, el impacto que la publicidad genera en la demanda de estos productos en muy elevado, por lo que desde el Colegio de Farmacéuticos están ?de acuerdo con el control concreto de la publicidad para concientizar a la población y evitar el consumo indiscriminado?.
?Los PNT hay que prohibirlos, es impresionante la reacción de la demanda en cuanto se publicitan, los medicamentos no son un bien de consumo, son un bien de salud?, subrayó Antún.
Por último, y tras comentar que existen posibilidades de tratarse estos proyectos en la próxima sesión ordinaria, el farmacéutico reconoció que ?está un poco difícil que se aprueben?, ya que ?hay mucho lobby de parte de la Cámara de Medicamentos de Venta Libre?.
?Los quiosqueros y la Cámara defienden una postura comercial, nosotros defendemos una postura sanitarista, a ellos les interesa abrir más bocas de expendio para el consumo indiscriminado de la población, para nosotros esto es en una conducta irresponsable que permite un mercado negro y facilita las adicciones?, concluyó.