El mensaje “anti casta”, que proyectó el fenómeno Javier Milei a la popularidad, toma cada vez más fuerza, sobre todo en jóvenes que muestran su desencanto con la política. En una nueva encuesta electoral, apuntada sobre este fragmento de la población, los libertarios se alejan de los dos principales representantes de la grieta.
A cargo de Gonzalo de Janin y Pedro Antenucci, la organización iberoamericana Mucho en Común realizó un sondeo titulado “Rumbo a los 40 años de Democracia”. Del 17 al 27 de marzo, relevó 1.821 casos, con +/- 2,3% de margen de error entre jóvenes de 16 a 35 años. El estudio reflejó el fuerte apoyo que recibe el líder de La Libertad Avanza de esta parte de la sociedad.
El sondeo comienza con las preocupaciones y el ánimo de los jóvenes. Allí, se puede observar que el 98% señala que hay una división social por cuestiones políticas fuerte o muy fuerte, y el 94% de los jóvenes considera que la división entre los políticos y la gente es fuerte o muy fuerte. En el mismo sentido, para 73% de los jóvenes, la división social entre ricos y pobres también es fuerte o muy fuerte. Una sociedad dividida por la política y la economía.
A su vez, el descontento con la política y sus respectivos dirigentes, como también la crisis económica que atraviesa el país, son los principales motivos de discusión entre los argentinos. Diferente es la perspectiva en temas como religión, donde el 79% cree que la división es leve o muy leve.
Respecto a las principales preocupaciones, la cuestión económica se adueña de la opinión de los más jóvenes. El 68% considera que es necesario reducir la presión impositiva (en línea con las consignas de Milei, pero también de Juntos por el Cambio).
El apoyo de los jóvenes a Milei
Según muestra el sondeo, los jóvenes son los principales acompañantes del mensaje “anti casta” con el que el economista se planta ante los funcionarios. Esto, sumado a la idea de que el Estado recorte sus gastos en cuestiones sociales.
El 38% de los jóvenes cree que es mejor que las empresas de servicios públicos sean gestionadas por empresas privadas, mientras que en otro de los ítems del estudio, el 70% está de acuerdo con la implementación de planes sociales, pero únicamente con la condición de que sean acotados en el tiempo.
¿Otra muestra de descreimiento en la política? Los partidos generan entre poca y ninguna adhesión en el 85% de los consultados.
Si bien casi la mitad de la población de 16 a 35 años (47%) no tiene preferencia por ningún espacio político, los libertarios son los que más provecho le sacan a este grupo de personas.
Al preguntar directamente por un espacio político de cara a las próximas elecciones presidenciales, La Libertad Avanza lidera con solvencia esta categoría: 25% de intención de voto, mientras que los dos principales representantes de la grieta apenas llegan al 20% entre ambos, sumando un 10% por coalición. Ni siquiera con el 2% que suma el Frente de Izquierda igualarían el porcentaje obtenido por el liberalismo.
El desencanto con los partidos también se ve reflejado en otros porcentajes del cuadro electoral: el 19% no votaría a ningún candidato del oficialismo ni de la principal oposición, mientras que un 27% todavía no lo tiene definido.
Cuando se hace el desglose por sexo y edad, entre otros ítems, el apoyo a Milei se consolida entre los más jóvenes (36% entre los que tienen de 18 a 25 años) y los varones de esta franja etárea (45% contra 11% de las mujeres).
El tiempo dirá si el fenómeno Milei se consolida en una propuesta propia. La otra alternativa es que se diluya por sí mismo o por incorporarse a Juntos por el Cambio.