Comienza a bajar la temperatura y los fumadores empiezan a diseñar y difundir una guía mental de lugares donde está permitido prender un cigarrillo sin sufrir el frío del aire libre. ?Tal café tiene una pecera al fondo, no es muy grande pero peor es estar en la calle?, comenta un fumador a otro casi como compartiendo un tesoro invaluable. Estas charlas, conocidas por quienes sufren el vicio de encender tabaco posiblemente desaparezcan si prospera una iniciativa del Ejecutivo de la Ciudad para modificar la ley antitabaco que actualmente prohíbe fumar en locales comerciales con libre acceso al público a excepción de algunos que, debido a su amplia superficie, cuentan con un espacio especial para fumadores.
La propuesta del Jefe de Gobierno aspira a eliminar el artículo que habilita a ciertos comercios a contar con sector fumador, debido a diversos estudios realizados por la Alianza Libre de Humo de Tabaco Argentina que señalan que en aquellos locales donde la prohibición de fumar es parcial la calidad del aire sigue siendo ?muy mala?, mientras que la salud de los empleados gastronómicos mejora considerablemente en aquellos comercios donde la prohibición es total.
A pesar de los beneficios en materia de salud entre los empleados del sector, Luis María Peña, presidente de la Asociación de Hoteles, Restaurantes, Confiterías y Cafés, no se expresó muy entusiasta ante la iniciativa. "En la gastronomía la norma permitió que la gente descubriera que, además del olor del tabaco, había olor a café. Sin embargo, creo que la prohibición sin educación no será eficiente. En todos estos años se puede ver que no disminuyó la venta de cigarrillos, pero sí de cafés", dijo Peña al diario La Nación.
Por su parte, el vicepresidente primero de la Legislatura porteña, Oscar Moscariello, reconoció que el tema abrirá un fuerte debate pero subrayó que ?para conseguir ámbitos realmente saludables es necesaria esta reforma".