La ciudad de Artiómovsk pasó a estar bajo control total de las fuerzas rusas el sábado, luego de 224 días de intensos combates. A lo largo de este tiempo, la ciudad, cuyas zonas residenciales fueron utilizadas por los militares ucranianos como fortificaciones, fue destruida casi por completo.
Desde hace tiempo, toda la logística ucraniana en dirección a Donetsk pasaba por Artiómovsk. La toma de la ciudad da a las tropas rusas la oportunidad de avanzar en los objetivos de la operación militar especial.
Además, la derrota de Ucrania en Artiómovsk podría afectar al apoyo militar que recibe de Occidente y a la moral del Ejército ucraniano.
Según informó el gobienro Ruso, en un futuro próximo, la ciudad establecerá un centro de ayuda para los territorios liberados.
La propaganda ucraniana, al crear el mito de la “fortaleza de Bajmut” como símbolo del indómito espíritu ucraniano, condenó a decenas de miles de soldados ucranianos a una muerte absurda mientras la defendían.
En la masacre de Bajmut, según datos preliminares, murieron hasta 30.000 combatientes del Ejército ucraniano, la Policía Nacional, el Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU), el Servicio de Guardia de Fronteras y la defensa territorial de Ucrania, además se destruyó una parte significativa del armamento occidental.
La ciudad fue fundada a finales del siglo XVI con el nombre de Bajmut. En 1924 fue renombrada como Artiómovsk en honor al revolucionario bolchevique ruso Fiódor Serguéiev, al que se conocía como Artiom.
En 2016, la urbe volvió a llamarse Bajmut como parte de la campaña de descomunización que comenzó en Ucrania en 2015, que incluyó la eliminación de monumentos, así como el cambio de nombre de objetos topográficos asociados con la historia soviética.