A horas de la inscripción de alianzas en el Frente de Todos (FdT) se advierte un clima de extrema tensión por la desconfianza entre los distintos sectores y el resabio por aquel ultimátum que planteó el presidente del PJ bonaerense cuando pujaba para forzar una candidatura de consenso.
Daniel Scioli es el que más preocupado está ya que en las últimas horas se intensificó la presión de Sergio Massa para que Cristina Kirchner imponga una lista de unidad y lo empujen a declinar su aspiración presidencial.
El punto principal tiene que ver con el porcentaje de votos que las listas que llevan los precandidatos a Presidente que compiten en la alianza en las PASO deben obtener para lograr integrar las boletas legislativas que representará al Frente en las elecciones generales.
Cuánto más alto es el piso más se les complica a los dirigentes conseguir adhesiones de estructuras importantes dispuestas a enfrentar a las fuerzas mayoritarias de la coalición. En criollo: sin el incentivo de entrar a Diputados, las Legislaturas ó Concejos Deliberantes, pocos se animan a desafiar a los K. Y entonces a Scioli y a la precandidata a gobernadora Victoria Tolosa Paz se les puede complicar para conseguir candidatos que los acompañen con recursos y músculo político.
En el sciolismo plantean la expectativa de que se establezca en torno al 20 por ciento del total de votos de la alianza como requisito mínimo para colar legisladores en las listas, pero entienden que entre la presión de Massa para que no haya competencia y la preferencia de Kirchner de unificar las candidaturas detrás de Eduardo “Wado” de Pedro ó Axel Kicillof, sus dos favoritos para la contienda, deberán conformarse si se respeta el 25% que se suele utilizar en el PJ.
Entre los K que reclaman requisitos duros para evitar la competencia, consideran que el reglamento es una atribución de cada partido y que fijando el 40% respetaría el espíritu que marca la Constitución de garantizar la representación. Cada sector tiene su biblioteca jurídica.
En cualquier caso, cerca del exgobernador bonaerense confían en que ante la difícil coyuntura que afronta el Frente de Todos (FdT) no será necesario recurrir a la judicialización.
No está claro qué camino tomarán los Kirchner. En efecto, más allá de su buena sintonía con Massa y que considera que Kicillof sería el mejor candidato si no fuera porque prefiere seguir en la Provincia, el jefe de La Cámpora dio señales de empujar la precandidatura de “Wado” de Pedro, quien se mostró abierto a competir en las PASO y ve en esa eventual contienda la oportunidad de terminar de despegar.