Un Senado empantanado por el no-hacer político y por pujas menores

Un Senado empantanado por el no-hacer político y por pujas menores

Los puentes entre el oficialismo y la oposición se encuentran cortados. Una sesión caída y un mensaje hacia la sociedad.


El Congreso de la Nación se transformó – una vez más – en el campo de batalla que enfrentó a las principales fuerzas políticas. Una balanza que trata, de forma permanente, inclinarse hacia un lado y hacia el otro y demuestra que el equilibrio es difícil de lograr, debido a la confrontación entre los bloques y en medio de una tempestad de intereses políticos que no impiden los necesarios acuerdos.

Los temas de la agenda funcionan como la llave para abrir o no los caminos hacia una sesión, algo que se le viene haciendo casi imposible al oficialismo, que se quedó con 31 senadores en la Cámara alta, luego de que cuatro de sus pares -Guillermo Snopek, Eduardo Kueider, Carlos “Camau” Espínola y María Eugenia Catalfamo- y una de sus aliadas -Alejandra Vigo- abandonaran el barco y complicaran el escenario político.

De esta forma, el nuevo bloque Unidad Federal, que armaron los cinco legisladores nacionales, hoy, representa la centralidad del espectro político en el Senado, ya que el FdT necesita de sus votos y ellos lo saben. En definitiva, pasaron de ser los que le aseguraban el quórum al oficialismo a ser su propio Talón de Aquiles.

Si bien el FdT no naufraga sólo en las aguas turbulentas, debido a que sus senadores amigos -Alberto Weretilneck, de Juntos Somos Río Negro, Magdalena Solari Quintana, del Frente Renovador de la Concordia y Clara Vega, de Cambiemos Fuerza Cívica Riojana- son los encargados de ayudarlo a llegar con los números para iniciar una sesión, el panorama ha cambiado de forma contundente.

Las estrategias políticas parecieran no alcanzar, porque las traiciones se ponen sobre la mesa y están a la vuelta de la esquina, en un año electoral que promete poco. Cualquier diferencia es clave para perder los consensos y truncar una sesión.

Y es lo que vivió el FdT este miércoles cuando, más allá de las negociaciones con los senadores del bloque de Unidad Federal, nada de lo prometido ocurrió y con 34 senadores se dio por caída la sesión porque no lograron los 37 que se necesitaban para darle inicio. Los ausentes fueron Kueider, Snopek y Weretilneck, aunque las excusas fueron diferentes. Sumado a esto, el interbloque de Juntos por el Cambio, que está integrado por 33 senadores se sabía de antemano que no iban a bajar al recinto hasta que el oficialismo no consiguiera el quórum.

Por su parte, el senador Kueider había arreglado con el FdT – detrás de bambalinas – que se tratase este martes su proyecto sobre la tarifa eléctrica diferencial para zonas cálidas en la Comisión de Minería, Energía y Combustibles, aunque el tema no prosperó como esperaba el entrerriano. La dilación para emitir dictamen no le gustó y su decisión fue clave para que la sesión no prosperase.

Asimismo, no era una convocatoria más para el oficialismo, ya que durante la “fallida” jornada se iban a tratar 75 pliegos de jueces y entre la nómina aparecía la camarista Ana María Figueroa, una de las juezas más importantes en la causa Hotesur-Los Sauces, que involucra a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.

La jugada política del Gobierno era aprobar que la jueza se mantuviese en el cargo porque cumplirá 75 años en agosto y debía jubilarse. Además, es la encargada de expedirse respecto al pedido que realizó el fiscal Mario Villar, de anular el sobreseimiento de la titular del Senado.

Entre los demás temas que iban a debatirse en el recinto estaban: la autorización de la entrada de tropas extranjeras al territorio nacional y la salida de las fuerzas nacionales, el proyecto sobre Fluoración de la sal para consumo humano, la creación del Programa Nacional Libros para Aprender, la creación del Programa de Prevención, Diagnóstico y Tratamiento Integral de la Pubertad Precoz y el proyecto que establece los procedimientos médico–asistenciales para la atención de mujeres y personas gestantes frente a la muerte perinatal.

Cabe recordar que el Senado no aprueba proyectos desde el 14 de abril y la última sesión se realizó el 11 de mayo cuando el jefe de Gabinete Agustín Rossi brindó su informe de gestión. La dinámica en la Cámara alta muestra dónde verdaderamente se está disputando el poder entre el FdT y JxC.

Desde el oficialismo incorporaron temas sensibles, como el de la Ley Johanna (muerte perinatal) o la pubertad precoz, con la intención de que la oposición se presentara y diera quórum, pero eso no ocurrió. Algo similar sucedió cuando, en el Senado, se intentó sancionar la Ley Lucio y Alcohol cero y la sesión tampoco prosperó.

De este modo, las repercusiones al interior del FdT no tardaron en llegar y durante las manifestaciones en minoría, el senador José Mayans se quejó porque “no podemos paralizar el Congreso. Está claro que los que estamos acá tenemos ganas de trabajar y cuesta mucho llevar adelante los temas”, agregó.

En la misma línea, su par oficialista y precandidato a gobernador de Santa Fe, Marcelo Lewandowski lamentó que no hayan aprobado la designación de jueces que estaban vinculados a su distrito, que está atravesando un momento complicado con el tema del narcotráfico. “Quiero expresarles a mis comprovincianos que a partir de hoy íbamos a tener al Dr. Román Lanzón sumándose al Tribunal Oral Federal N°2 en la ciudad de Rosario”. Además, había otros pliegos para ocupar cargos en la Justicia de Santa Fe.

Por último, la senadora, cercana a la Vicepresidenta, Anabel Fernández Sagasti, cruzó a la oposición. “Llamamos al jefe del Interbloque de JxC y le ofrecimos sacar todos los pliegos que a ellos les molesta, y que tratáramos los temas de consenso, pero ni siquiera nos dieron una respuesta y se fueron a dar una conferencia de prensa para mentir”.

Como puede observarse, los canales de comunicación entre el oficialismo y la oposición están cortados y pareciera ser que arribar a consensos se ha transformado en una utopía. La incertidumbre sobre cómo continuará la novela es evidente y se pone de relieve que los números son ajustados para poder avanzar, en medio de tantas demandas sociales que esperan saldadas.

Qué se dice del tema...