Pueblos indígenas, integrantes del Tercer Malón de la Paz, arribaron este miércoles a la Ciudad de Buenos Aires, tras una semana de caravana desde la provincia de Jujuy, en defensa de sus territorios, sus recursos naturales y contra la reforma constitucional impulsada por el gobernador y precandidato a vicepresidente de Juntos por el Cambio (JxC), Gerardo Morales.
El Malón está integrado por comuneros de los pueblos originarios que habitan la provincia de Jujuy, movilizados en contra de la Reforma de la Constitución jujeña y reclaman que sea declarada nula, en defensa del agua y del derecho a sus tierras. Luego de su llegada se instalaron por frente al Palacio de Tribunales a la espera de una definición de la Corte Suprema de Justicia sobre la inconstitucionalidad de esta reforma que llevó adelante el gobernador Gerardo Morales.
Esta es la marcha indígena más grande desde el Bicentenario. Se decidió mientras en Jujuy las comunidades andinas mantienen, desde hace un mes y medio, cortes de ruta contra la Reforma Constitucional. Las sucesivas represiones dispuestas por Morales no han desarmado esta protesta, pero los cortes a su vez tampoco han conseguido hacer caer a la Reforma.
En el marco del reclamo del Gobierno nacional, el Tercer Malón de la Paz también solicita a “la Corte Suprema de Justicia que se expida sobre la inconstitucionalidad de la reforma de la constitución jujeña” y para que el Congreso Nacional “sancione la Ley de Propiedad Comunitaria Indígena”, que proteja sus tierras y los recursos naturales.
En ese sentido, también demandaron a la Corte Suprema que “tome las medidas para la intervención federal de la provincia de Jujuy, por violencia institucional, persecución y detención de los manifestantes”, luego de la represión contra las protesta y la judicialización de las personas que participaron de las protestas, que continúan en las rutas jujeñas.
El Malón de la Paz: su origen
La marcha de los pueblos originarios reedita la gesta más grande de originarios por la lucha de sus territorios, conocida como el Malón de la Paz, que en 1946 emprendieron 174 collas jujeños y salteños a Buenos Aires para pedir por la apropiación de sus tierras.
Se escogió el nombre por representar un oxímoron: malón proviene de la expresión del idioma mapuche “malok”, que significa “invasión”.
El segundo Malón de la Paz fue en 2006, organizado para demandar al Gobierno de Jujuy el cumplimiento con una orden judicial de retornar a las comunidades originarias cerca de 15.000 kilómetros cuadrados de tierras.