La Cámara de Diputados inició las negociaciones para definir a sus autoridades junto a la creación de interbloques e integración de las comisiones. El proceso apunta a la nueva conformación que tendrá el cuerpo parlamentario a partir del 10 de diciembre. La presidencia de la Cámara baja es el primer tema a definir, y está trabado por una disputa entre La Libertad Avanza (LLA) y el Pro.
Según marca la tradición parlamentaria, este lugar debería ser ocupado por el futuro oficialismo, en este caso La Libertad Avanza (LLA), algún integrante de su aliado el Pro o un independiente, incluso cuando no sea el espacio con mayor volumen en la nueva integración.
Los nombres que más suenan para la titularidad de la Cámara son Oscar Zago y Guillermo Montenegro, de La Libertad Avanza (LLA); Florencio Randazzo, hombre de Schiaretti; Miguel Pichetto, de Encuentro Republicano Federal y Cristian Ritondo, por parte del Pro.
Lo que sucederá en este caso encuentra un antecedente inmediato en diciembre de 2015, cuando el Frente para la Victoria (FPV) tenía una mayor cantidad de bancas que Cambiemos e igualmente le cedió la presidencia a Emilio Monzó (Pro).
En lo que respecta a los bloques e interbloques, desde el sector ganador del balotaje consideran la convivencia de crear una unión entre La Libertad Avanza (LLA) y el sector del Pro que apoya a Javier Milei, constituyendo una bancada que sumaría entre 67 y 70 diputados.
De esta manera se unirían los 37 legisladores del sector libertario con los 30 o 33 del Pro y otros provenientes de monobloques que integran Juntos por el Cambio (JxC), como el de Ricardo López Murphy y el de Raúl Zapata.
El resto de socios de Juntos por el Cambio (JxC) se encuentra analizando la idea de un interbloque “centro-democrático” constituido por entre 55 y 60 diputados, donde se encontrarán unos 35 radicales, 10 del Pro, 3 del espacio de Monzó y Margarita Stolbizer, Pichetto y los legisladores de las provincias que a partir de diciembre gobernará Juntos por el Cambio (JxC). Desde el sector esperan convencer a la Coalición Cívica (CCA) para que permanezca dentro del interbloque.
El oficialismo, por su parte, espera mantener la unidad y que se mantengan unidos los 105 diputados que integran el bloque y provienen de espacios como el kirchnerismo, La Cámpora, el Frente Renovador (FR), los movimientos sociales, entre otros.
En tanto, el Frente Renovador de la Concordia misionero, que en la elección de octubre integró su lista de diputados nacionales a la boleta que llevaba a Sergio Massa como presidente, continuará como bloque propio, con sus 4 integrantes.
Otros espacios provinciales que tendrán representantes, y que también deben definir si se agrupan o no, son el oficialismo cordobés, con 6 diputados -incluido Randazzo-: el santacruceño, con 2; el Socialismo (integra la alianza que gobernará Santa Fe), con 2, y Neuquén y Río Negro, con uno cada uno.
En la paridad de fuerzas de la nueva Cámara, los cinco diputados de la Izquierda jugarán un rol importante de cara a la conformación del quórum y de la votación de los proyectos.