La relación entre el presidente Javier Milei y el Congreso de la Nación se complejiza cada día más debido a muchos factores que ponen en jaque los consensos que necesita el mandatario para poder gobernar. Desde el mismo día de la asunción del economista la situación que no comenzó bien porque su discurso frente a la Asamblea Legislativa fue muy esperada por los distintos bloques, pero nunca llegó.
Luego, los diputados nacionales salieron a cuestionar la actitud del jefe de Estado y la pulseada política se complicó más, ya que, ahora, el bloque de Unión por la Patria intentará ir por el 40% de las comisiones en la Cámara de Diputados.
En este sentido, el titular del bloque Germán Martínez (UP) le adelantó a Infobae: “Somos casi el 40% de la Cámara y aspiramos a conducir el 40% de las comisiones y tener el 40% de los integrantes como piso”.
Además, el santafesino explicó que eso fue lo acordado en la sesión preparatoria en la que se votó realizar el reparto por sistema D’Hondt. “Nosotros no vamos a trabar nada”, aseguró. Y resaltó que “hay un un 60% de la Cámara de Diputados que deberá establecer su posicionamiento y definir”.
Asimismo, el bloque que será el principal opositor al Gobierno nacional se impuso desde el día 1, pero no todo queda allí porque será complicado para La Libertad Avanza poder negociar con los espacios que quedaron divididos en Diputados. Con un Congreso atomizado, Milei tendrá grandes desafíos por delante que lo atará a un número clave, 129, que será la cantidad de diputados que necesitará para el quórum.
En tanto, el rol del presidente de la Cámara baja, Martín Menem, será crucial para sentarse a analizar las concesiones que tendrá que hacer con todos los bloques minoritarios porque el Presidente no podrá gobernar por sólo por DNU. Y se sabe que el Poder Legislativo siempre tiene que ser el principal aliado, más allá de las diferencias políticas que se tengan con las demás fuerzas políticas. La era Milei comenzó con grandes retos que deberá sortear para gobernar.