El papa Francisco invitó este viernes a Javier Milei a visitar el Vaticano en febrero y presenciar así la ceremonia de canonización de Mamá Antula, la primera santa argentina, en una devolución de gentilezas luego de que el Presidente le enviara el jueves una carta, expresándole el “deseo generalizado” que que venga al país. Si bien desde el Gobierno aclararon que “hasta el momento no está confirmado oficialmente” el viaje del mandatario nacional a Roma, el Vaticano ya hizo llegar la invitación, que incluiría también una audiencia privada con el Sumo Pontífice.
Ese encuentro sería la oportunidad para limar asperezas y dejar definitivamente atrás la tensión que generaron las declaraciones cruzadas entre Milei y Francisco durante la campaña electoral del actual Presidente.
“Ya había pedido perdón y lo volvería a hacer, porque, si me equivoco, no tengo problema en repetir que estoy arrepentido por eso”, había manifestado el líder libertario durante el último debate presidencial, una semana antes del balotaje con Sergio Massa.
En tanto, en la carta que el jueves difundió la propia Oficina del Presidente, Milei expresó: “Usted bien sabe que no necesita invitación para venir a la Argentina. A riesgo de decir lo innecesario, le invito a visitar nuestra amada Patria, conforme a las fechas y los lugares que nos sean indicados, teniendo presente el deseo generalizado de nuestras ciudades, provincias y pueblos de contar con su presencia y transmitirle su filial afecto”.
“Considero que su viaje traerá frutos de pacificación y hermanamiento de todos los argentinos, ansiosos de superar nuestras divisiones y enfrentamientos”, agregó el mandatario nacional.
“Agradezco su muy significativo llamado telefónico del 22 de noviembre, luego de mi elección como Presidente. Valoro sus sabios consejos y sus deseos de coraje y sabiduría para mi persona, ten necesarios para encarar el desafío de dirigir los destinos de nuestra Patria y de nuestros conciudadanos”, agregó el escrito dirigido al titular de la Santa Sede.
"Usted bien sabe que no necesita invitación para venir a la Argentina. A riesgo de decir lo innecesario, le invito a visitar nuestra amada Patria, conforme a las fechas y los lugares que nos sean indicados, teniendo presente el deseo generalizado de nuestras ciudades, provincias… pic.twitter.com/MPjjpIZ3eL
— Oficina del Presidente (@OPRArgentina) January 11, 2024
Manuel Adorni: “El viaje del presidente Milei al Vaticano no está confirmado”
Luego de que trascendiera que el presidente Javier Milei visitaría al Papa Francisco en febrero próximo, el vocero presidencial, Manuel Adorni, expresó este viernes que el viaje del jefe de Estado al Vaticano “no está confirmado”, al igual que otros viajes que tendría planeado realizar en ese mes.
“No hay ningún viaje confirmado, ni el del Vaticano ni a Israel”, señaló el portavoz al ser consultado por una serie de rumores que daban cuenta del vuelo del Presidente a Roma para entrevistarse con el Sumo Pontífice, en su habitual conferencia de prensa desde Casa Rosada.
“Sea la fecha que sea y sea el lugar que sea, los viajes se los estaré confirmando yo mismo. Supongo que hicieron conjeturas”, añadió Adorni. Por otro lado, mencionó que el Gobierno está dispuesto a “llevar adelante cualquier acción que implique reducir gastos” y, en ese sentido, Javier Milei viajará “en un avión de línea al Foro de Davos”.
Casa Rosada, 12 de enero de 2024.
Conferencia de prensa del Vocero Presidencial. pic.twitter.com/XIxIjgyB3H— Vocería Presidencial (@Voceria_Ar) January 12, 2024
Mama Antula y la historia de un milagro
El 24 de octubre pasado, Francisco autorizó al Dicasterio para las Causas de los Santos promulgar el decreto sobre un milagro atribuido a la intercesión de la beata María Antonia de San José, nacida Antonia de Paz y Figueroa y conocida como Mama Antula.
La fundadora de la Casa de Ejercicios Espirituales de Buenos Aires -que nació en 1730 en Silipica, Santiago del Estero, y murió el 7 de marzo de 1799 en Buenos Aires- se convertirá así en la primera santa argentina.
Mama Antula había sido beatificada en 2016 en Santiago del Estero, luego de que el Papa autorizara la publicación de un milagro por la sanación de la religiosa María Rosa Vanina, de las Hijas del Divino Salvador, quien habría recuperado la salud en el año 1904 por intercesión de la fundadora y madre espiritual de esa congregación.
En 2010, Benedicto XVI había dado el primer paso hacia la beatificación de Mama Antula al considerarla “venerable”, tras reconocer que “practicó las virtudes cristianas en grado heroico”.
El milagro que se le atribuye a Mama Antula obedece a la supervivencia milagrosa de Claudio Perusini (nacido en Santa Fe en 1959), quien en 2017 sufrió un “ictus isquémico con infarto hemorrágico en varias zonas, coma profundo, sepsis, shock séptico resistente, con fallo multiorgánico”. Ingresado en la unidad de cuidados intensivos del hospital José M. Cullen de la ciudad de Santa Fe en estado comatoso, el pronóstico era poco auspicioso o muy reservado, con muy pocas posibilidades de volver a la vida normal debido a las lesiones cerebrales irreparables. Permaneció 28 días en estado vegetativo.
Al cabo de unos días, Perusini mostró una notable mejoría y, tras unos meses de fisioterapia en el Hospital Vera Candioti, era independiente, autónomo en su vida diaria, realizando tareas manuales normales. Todos los familiares y amigos habían rezado pidiendo la intercesión de Mama Antula. Siete personas que no eran amigos ni familiares también rezaron por la salud del enfermo.
Fue monseñor Giobando, amigo personal de la familia Perusini, quien les acercó la imagen de Mama Antula para que le recen cuando Claudio estaba internado en el Cullen. Desde aquel día el hombre lleva consigo aquella estampita. La tiene escondida en la funda de su celular.
La sanación de Perusini no tiene explicación médica. Fue considerada un posible milagro.
Es que la relación entre los rezos y curación se hizo clara y evidente. A esa conclusión científica llegaron los médicos. Además se consideró una consulta médica realizada el pasado 14 de septiembre y la documentación que atestigua la invocación de la beata.
