Las polémicas en torno a los proyectos que presenta el oficialismo en el Congreso de la Nación siguen marcando la agenda política. Luego de que el presidente Javier Milei decidiera retirar el proyecto de la Ley Ómnibus porque no pudo ni siquiera recibir media sanción, ahora, la discusión tomó otro giro inesperado.
Este miércoles, se conoció que la diputada nacional Rocío Bonacci (LLA) presentó un proyecto de ley para derogar la Interrupción Voluntaria del Embarazo (Ley 27.610), que fue aprobada en el 2020 por el Poder Legislativo y rige desde enero del 2021.
La iniciativa que presentó la santafesina propone que las penas vayan de tres a diez años “si se obrare sin el consentimiento de la mujer” y podrían elevarse a los quince años, en el caso de que la persona gestante muera después de haberse realizado la práctica.
Además, en la normativa se explicita que si se realiza un aborto “con el consentimiento de la mujer”, la reclusión o prisión será “de uno a cuatro años”. Y agrega: “El máximum de la pena se elevará a seis años, si el hecho fuere seguido de la muerte de la mujer”. En el mismo sentido, “los médicos, cirujanos, parteras o farmacéuticos que abusaren de su ciencia o arte para causar el aborto o cooperaren a causarlo” sufrirán una “inhabilitación especial por doble tiempo que el de la condena”.
Por último, el proyecto modifica el artículo 88 del Código Penal y advierte que “será reprimida con prisión de uno a tres años, la mujer que causare su propio aborto o consintiere en que otro se lo causare”. “La tentativa de la mujer no es punible”, refuta.
En tanto, los diputados libertarios Beltrán Benedit, María Fernanda Araujo, Lilia Lemoine, Manuel Quintar y hasta, incluso, el jefe del bloque oficialista Oscar Zago acompañaron con sus firmas. Cabe destacar que la normativa ya fue girada a cuatro comisiones: Legislación General; Legislación Penal; Mujeres y Diversidad; y Acción Social y Salud Pública.
Pero no todo quedó allí porque parece ser que quienes figuraban en el proyecto no estaban enterados, como pasó con la legisladora nacional Lemoine. “Pusieron mi nombre porque dije que iba a acompañar pero que no era el momento ahora y me metió igual. Es muy dañino”, denunció en una entrevista a Corta. Bonacci había dicho que las firmas de sus colegas que aparecen en su proyecto no eran de “puño y letra” y que charló con algunos “por WhatsApp” y con otros de forma personal.
Asimismo, algunos compañeros del espacio criticaron la presentación de la iniciativa y dijeron que “no era el momento” y hasta el propio Gobierno salió a despegarse. Fue el vocero presidencial, Manuel Adorni, quien informó que “es una discusión legislativa y no es parte de la agenda del Presidente”. “No ha sido una decisión del Presidente y no ha sido impulsado de ninguna manera por el Poder Ejecutivo”, sentenció.
El proyecto es mi iniciativa no del Ejecutivo y ha sido puesto a la consideracion del cuerpo que integro. Defiendo la vida. Ni más, ni menos. pic.twitter.com/PwDslhdSIX
— 🇦🇷 Rocío Belén Bonacci (@RocioBonacci) February 8, 2024
Por su parte, Bonacci expresó en su cuenta X: “El proyecto es mi iniciativa no del Ejecutivo y ha sido puesto a la consideración del cuerpo que integro. Defiendo la vida. Ni más, ni menos”. Y arremetió: “Los diputados pueden y deben presentar proyectos. No sabía que tenía que pedir permiso para proceder”.