El mundo libertario se convirtió en un hervidero después de que Martín Menem y Victoria Villarruel hicieran extensivo a las dietas de los legisladores nacionales el aumento del 30% otorgado a los empleados del Congreso. Arropados con las banderas del ajuste, del “no hay plata” y del combate contra “la casta política”, la medida profundizó las diferencias entre los oficialistas más dogmáticos y aquellos que consideran injustificados los cuestionamientos.
La tensión escaló cuando llegó el tirón de orejas desde el Poder Ejecutivo y por estas horas en la presidencia de la Cámara de Diputados apuran un “anuncio” al respecto. En el Senado, en tanto, predomina el silencio.
Una de las opciones que se barajan es presentar un proyecto por el que se determine un congelamiento del aumento otorgado y atar la dieta de los diputados a la misma fórmula de actualización de los haberes jubilatorios. Una idea que, según trascendió, le acercó el diputado Pro Diego Santilli al presidente Javier Milei. Antes, el mandatario le hizo conocer su desacuerdo a Menem, deslizaron fuentes libertarias.
Por orden del Presidente Javier Milei, vamos a presentar un proyecto para RETROTRAER el aumento que fue otorgado a diputados y senadores de la Nación de manera automática, debido a la resolución 0013/11 firmada por el ex-presidente del Senado Amado Boudou y el ex-presidente de la…
— Martin Menem (@MenemMartin) March 7, 2024
La sucesión de los hechos
El presidente Javier Milei intervino en la polémica por la suba del 30 por ciento a diputados y senadores que contradijo su narrativa de recorte a la clase política para justificar el ajuste. En los bloques libertarios dijeron que fue un error y en Diputados presentarán un proyecto para dar marcha atrás.
La medida provocó una fuerte polémica durante los últimos dos días en el mundillo que más le importa al líder de La Libertad Avanza (LLA): las redes sociales. Por eso, el mandatario les pidió explicaciones y una retrotracción de la decisión a los responsables, Martín Menem y Victoria Villarruel.
La suba, sobre la que supuestamente los líderes legislativos libertarios no tenían registro, puso en alerta al Presidente, que la consideró como una señal contradictoria con la narrativa ante su preciada opinión pública de parte del Gobierno, que busca acompañar y, de alguna manera, justificar el fuerte ajuste económico con un recorte del Estado y la clase política. Así, Milei decidió sumar inesperadamente un nuevo tema del orden legislativo, que no lo entusiasma, a la preparación de la estrategia para negociar con los gobernadores la Ley Ómnibus reversionada y el Pacto de Mayo.
En Gobierno, sin embargo, intentaron aplacar la idea de una interna y aseguraron que el enojo del primer mandatario no estuvo direccionado a Menem ni a Villarruel, “sino al aumento en sí mismo”, a pesar de que fueron los titulares de ambas Cámaras del Congreso quienes firmaron la resolución que puso en vigencia la medida. “Le explicaron que se trataba de una norma que data de 2011, que automatiza los aumentos”, atenuaron el problema en la Casa Rosada, muy escuetos, dejando entrever que las cabezas de las Cámaras cometieron un error. “Fue un tema administrativo que ahora se va a dar vuelta”, acotaron en Balcarce 50.
El aumento autorizado fue del 30% para los trabajadores del Palacio para enero y febrero, pero como esa paritaria impacta también en las dietas de los legisladores, el salario promedio de los 257 diputados y 72 senadores llegó a los 2,5 millones de pesos.
Además, a ese número habría que sumarle el “plus por desarraigo” -para que los miembros del cuerpo que no son representantes de la Ciudad de Buenos Aires usen en pasajes tanto de ómnibus de larga distancia como de aviones- y los gastos de representación.
La “calentura” de Milei se conoció 48 horas después del incremento que, hasta hace tan sólo algunas horas, era defendido en el bloque libertario. De hecho, esta mañana el propio Menem había pedido comparar los salarios de senadores y diputados con los que perciben sus pares provinciales, los camaristas, los trabajadores de la AFIP o del Banco Central, como argumento a favor.
El proyecto
a polémica que generó el aumento del 30% en los salarios de diputados y senadores por orden de los presidentes del cuerpo, Martín Menem y Victoria Villarruel, podría retrotraerse a través de un proyecto de ley que presentará un legislador de su propio espacio. Se trata de Carlos González D’Alessandro, quien habló de “dar marcha atrás dicho aumento” luego de una charla con el propio Menem. Antes, distintos legisladores habían defendido el aumento.
“Conversamos esta mañana con el presidente de la Honorable Cámara de Diputados @MenemMartin, ambos estamos de acuerdo en que hay que retrotraer el aumento que recibimos Diputados y Senadores. Consensuamos presentar un proyecto para dar marcha atrás dicho aumento. Esperamos que la Cámara de Senadores, el Poder Ejecutivo, y el Poder Judicial se sumen a esta iniciativa.@JMilei @VickyVillarruel”, aseguró en un posteo de X el diputado, este mediodía.
La noticia, que se conoció este miércoles, generó ruido por los sueldos que cobran los legisladores en simultáneo con la crisis que atraviesa el grueso de la población. Si se tienen en cuenta los valores de los diputados, con la suba pasaron de cobrar $ 1.567.000 en enero a $ 1.984.000 en febrero.
Conversamos esta mañana con el presidente de la Honorable Cámara de Diputados @MenemMartin, ambos estamos de acuerdo en que hay que retrotraer el aumento que recibimos Diputados y Senadores. Consensuamos presentar un proyecto para dar marcha atrás dicho aumento. Esperamos que la… pic.twitter.com/jjCgk7QEva
— Carlos Gonzalez D'Alessandro (@_cdalessandro) March 7, 2024