El Ministro de Finanzas les reclamó a los supermercados la suba de precios e insistió en que no es un reflejo de la realidad. ¿Coincide?
Sí, por supuesto. Y ni siquiera es que esto ocurre solo con los supermercados. Fijate lo que pasó con la carne. En el mes de diciembre estaba el precio por las nubes, en enero, siguió estando alto y en febrero, bajó abruptamente. Lo digo, pero no quiero que crean que me tiro en contra de las pizzerías… Hoy, es más barato invitar a tu familia a comer a tu casa un bife de chorizo que una pizza. Es una locura. Agua y harina contra la carne. Se zarparon. Y otra cuestión que observo, porque yo voy y hago los compras en el supermercado, es el tema de la papa. Yo, lo único que como son papas fritas de tubo. En octubre, valían $130 y hoy, valen $1900. ¿Se entiende la locura? Y estoy hablando de la de segunda marca. No entiendo, ¿la papa la trae un chino desde China? Déjense de joder, la papa viene de acá, de Balcarce. Me parece que se fueron de mambo.
¿Y a qué cree que obedeció, entonces, la suba de precios de los productos?
Porque somos argentinos. Tenemos miedo de todo. El típico “por las dudas”. Para cambiar culturalmente, como nosotros decimos, nos va a costar un montón. Porque nos rompieron la cabeza culturalmente. ¿Qué hacen con los productos que se vencen en 30 o 50 días? Van a tener que modificar los precios. Porque si no los van a tener que tirar. Y van a perder mucha más plata de la que se creen que iban a ganar.
¿Usted considera que en el segundo semestre se van a percibir mejoras económicas?
Los peores meses de la historia, y no es algo que inventamos nosotros, son marzo y abril. En marzo, es volver de las vacaciones y rearmar tu casa porque te la gastaste toda, las tarifas se acomodan para arriba siempre, tenés que pagar colegio o universidad, llenar la heladera… Es decir, un montón de factores que hacen que tu economía se vaya hacia abajo. ¿Entonces, qué hace la gente? Empieza a invertir sus ahorros. Cambia 100 o 200 dólares. Esa es la economía minorista. Y gasta para poder poner en marcha su economía familiar. El de la clase media es el que siempre pierde más.
¿Y en el campo?
No sé de qué sequía están hablando. Se está inundando la Ciudad de Buenos Aires y el país. De eso no se deberían quejar. Lluvias para el campo tuvieron. Estoy hablando para las cosechas, incluso para el ganado. Si después, mundialmente, se cae el precio de la soja o el trigo, eso es otra cosa.
Otro área importante es el de la construcción que está bajando cada vez más.
Sí. Hay una nueva caída. Y hubo un estancamiento que es lógico en los meses de enero, febrero. Hay mucha gente de la mano de obra que son nuestros hermanos de Bolivia y Paraguay. Y durante esos meses, aprovechan para volver a sus países a visitar a sus familias.
¿Pero no cree que se vincula con la reducción de la obra publica?
Puede ser, puede ser. Me parece que la obra publica viene estando parada hace tiempo. Y esto se va a ir reacomodando una vez que las provincias tengan su propio presupuesto. Calculo que igual se va a pedir que se terminen rutas y todo ese tipo de obras pesadas, que son importantes tanto para Nación como para las provincias.
Pasando a otro tema, se reavivó la polémica por el aumento de los salarios de los legisladores. ¿Qué cree que se debería hacer?
Nos tenemos que volver a sentar en la mesa de la discusión. Entiendo que pasó algo parecido en Cancillería. Y es lógico. Era una bomba que en algún momento iba a explotar. No hay nadie que tenga más responsabilidad que otro. Acá, somos todos responsables de todo. Por eso, insisto con que nos tenemos que volver a sentar en la mesa de la discusión y transparentar todo. La situación es compleja para todos. Yo, Oscar Zago, digo que el Presidente de la Corte Suprema no puede ganar más que el Presidente de la Nación. Y ni siquiera eso. Un juez federal gana más que el Presidente.
¿Y los salarios de los maestros y policías?
Todo se tiene que revisar. Pero sí: se tienen que priorizar a los maestros, los policías y los jubilados. Los jubilados no puede esperar toda la vida. No puede que todo el resto de los funcionarios tengan un salario que esté por encima. Es injusto.
Y puntualmente hablando del tema de Seguridad, ¿no piensa que los bajos salarios de los policías generan incentivos para la corrupción? ¿Ve algo de esto en lo que está pasando en Rosario?
Me parece que lo que está sucediendo en Rosario tiene que ver con que es algo que se dejó estar hace ya muchos años. El narcotráfico tomó a Santa Fe como una provincia de instalación, como seguro que ocurrió en otros países. Se enquistan en un Estado y de ahí, empiezan a desarrollarse. Y el tema es que no lo atacaron cuando tendrían que haberlo atacado. Hoy, la problemática sería mucho menor. No lo atacaron porque, por un lado, lo subestimaron y después, está la corrupción policial y política. Es como no extirpar el tumor a tiempo. Si no se lo extirpa, se empieza a ramificar y ya es tarde.
¿Entonces ya es tarde?
Hoy no es tarde todavía. Hay una posibilidad de combatir ese cáncer, mientras que no se siga ramificando. Hay que atacar el foco con todo y darle con todas las herramientas. Pero sin descuidar el alrededor. Hay que derivar, porque no se pueden descuidar el resto de las provincias, adonde se puede seguir expandiendo el narcotráfico. Hay que atacarlo en todos los frentes.
¿Y cómo se resuelve la urgencia de detener los asesinatos a los civiles?
Es el mismo modus operandi que se hizo en Colombia, por ejemplo. ¿Quiénes eran las víctimas de las bombas que ponían los narcotraficantes? Los civiles. De esta forma, crean el caos y el terror. Hay que salir a buscarlos y combatir por todos los frentes. Y creo que tanto la Ministra de Seguridad como el Presidente han declarado en varios reportajes que su prioridad es resolver esta problemática.
Por último, en su rol como legislador, ¿en qué proyectos está trabajando?
Hoy, estamos trabajando en la Ley de Bases. Veremos si va a entrar o no de vuelta. Igualmente, vamos a hablar con el jefe de Gabinete y los ministros para ver cómo viene el diálogo con los gobernadores. Y ver qué tipo de leyes se van a mandar antes del 25 de mayo, que es cuando se va a intentar el gran pacto que propuso el Presidente.