El gobernador de la provincia de Buenos Aires se mostró indignado por otra resolución del gobierno de Javier Milei: “Es impresionante, la decisión de Milei es que el ajuste no recaiga en la casta sino en los jubilados”, reflexionó Axel Kicillof al analizar el contenido del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) según el cual la nueva fórmula comenzará a aplicarse en julio y no en abril como se había anunciado.
“Es un atraco a los jubilados… es consolidar una baja que ya se produjo, y ahora ir ajustándola en base a los precios cuando ya el guadañazo se lo dieron al bolsillo de ellos”, consideró el gobernador bonaerense.
En ese contexto, Kicillof advirtió que esto va a provocar una reacción en conjunto de la oposición porque el tema de las jubilaciones es central para todos los espacios: “Veremos cómo se organiza, nosotros por supuesto que en base a esto vamos a ponernos en contacto porque todas las fuerzas políticas están preocupadas”.
“La otra vez hubo una sesión para llegar por ley a una fórmula jubilatoria que les restituya el poder adquisitivo y los proteja contra la decisiones de Javier Milei. Eso estuvo creo que a tres diputados de conseguir el quorum”, recordó en la misma entrevista.
El gobernador bonaerense argumentó, en ese sentido, que un nuevo intento es posible porque la inquietud por las jubilaciones “es transversal a las fuerzas políticas”; incluso a las que a veces “les cuesta ponerse de acuerdo”.
“Hay puntos de coincidencia que hay que empezar a buscar, más allá de toda provocación y de todo intento (que hace el gobierno nacional) de dividir, ahora no ya al peronismo sino a las fuerzas políticas democráticas. Esto de reivindicar o no condenar la dictadura militar nos pone en otro cuadro de posibilidad de acuerdos; lo mismo la cuestión de los jubilados”, alertó Kicillof.
En cuanto a la relación de Milei con los gobernadores, aseguró que son más los rumores y las especulaciones que las señales concretas: “Se dijo que iba a haber una convocatoria pero nadie recibió ningún llamado. En el caso de la Provincia de Buenos Aires hay algún contacto a nivel de ministros, pero muy frustrante porque hay cuestiones discrecionales”.
“Yo creo que todo tiene una evolución muy lamentable: cuando se cae la Ley Ómnibus, por imposibilidad del Gobierno de llegar a ningún acuerdo y después por su impericia y su torpeza, que creen que teniendo una aprobación en general podían mandarla a comisión y no sabían que volvía a foja cero”, recordó en la misma entrevista radial. “En lugar de asumir esa incapacidad, la respuesta fue decir ‘vamos a fundir a las provincias’”, lamentó.
En cuanto al llamado a una rebelión fiscal en la provincia de Buenos Aires, que realizaron referentes del gobierno nacional (Milei entre ellos), Kicillof señaló: “La propia vicepresidenta Victoria Villarruel dijo que no tenía lógica que funcionarios públicos llamaran a incumplir leyes. Es evidente pero pareciera que este gobierno está dispuesto a traspasar las fronteras de lo evidente. Creo que es la primera vez que un Presidente de la Nación llama a incumplir normas de forma tan abierta”.
La nueva versión de la Ley Ómnibus también fue evaluada por el Gobernador de la provincia de Buenos Aires, quien no se mostró muy optimista sobre un eventual consenso: “Hay temas que son claramente irritantes para todos los sectores, por más que han tratado de reducirla”.
“Siguen estando ahí las emergencias y la delegación de facultades. No sé si hay algún acuerdo, sobre todo después de los recortes a las provincias que siguen vigentes en el DNU. Es como darle las facultades a Milei para que tome decisiones inconsultas que son perjudiciales para los distritos que tiene que seguir encargándose de la Salud y la Educación”, concluyó.