En el primer día hábil tras el fin de semana extralargo por Semana Santa y el Día del Veterano y los caídos en la Guerra de Malvinas, comenzó la protesta nacional impulsada por la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) en rechazo a los más de 11.000 despidos en la administración nacional. La medida comenzó pasadas las 9 de este miércoles e incluye, además de un paro nacional, un ingreso masivo a distintas oficinas públicas.
Los primeros momentos de tensión se vivieron en la sede del Inadi, cuando minutos después de las 10, el grupo de trabajadores despedidos lograron vencer la valla policial que habían formado un grupo de agentes y lograron ingresar al edificio. Más tarde, a las puertas del lugar llegó la Infantería para reforzar la custodia. La misma situación se vive en otros edificios donde funcionan distintas dependencias estatales.
Tanto la Policía Federal como efectivos porteños se encuentran apostados en cada uno de los edificios públicos como la Cancillería, el Servicio Meteorológico Nacional, el ex Ministerio de Trabajo y la sede central del Conicet, entre otros. Las protestas también se replican en algunos puntos del resto del país.
En medio de las protestas, el vocero presidencial, Manuel Adorni, afirmó que “el número ronda los 15 mil contratos que no se han renovado” y aseguró que “es parte del trabajo para achicar los gastos del Estado, personal que no es necesario que no siga cobrando un ingreso del Estado, del otro lado hay un contribuyente que lo paga”.
En la previa, el secretario general del gremio, Rodolfo Aguiar, aseguró: “El Presidente se ha decidido a quebrantar el sistema jurídico argentino en su parte medular y tanto él como sus funcionarios podrían terminar presos”. Según el recuento realizado el fin de semana por el gremio, los despidos ascienden a 11.000 en toda la administración pública, un número que se aproxima a los 15.000 que el Presidente Milei aseguró haber alcanzado durante su gestión.
“Provocar cesantías masivas en el Estado es suprimir derechos fundamentales de las personas y esa es una conducta tipificada en nuestro Código Penal”, argumentó el dirigente sindical.
La fila de trabajadores en el Conicet
Bajo la mirada de un largo despliegue policial, se observó a los trabajadores del Polo Científico formando una fila debajo de la lluvia. Según denunciaron, debían esperar antes de ingresar para corroborar uno por uno quiénes seguían perteneciendo al organismo o habían sido despedidos.
A través de las redes sociales se viralizaron distintos videos y fotos que mostraban esta escena. También se vio un CONICET (Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas) poblado de agentes de seguridad que custodiaban el edificio.
Desde ATE CONICET Capital, redactaron: “Denunciamos el despliegue policial durante la mañana de hoy con el fin de amedrentar a los trabajadores de todo el del Polo Científico, obligando a formar una fila para corroborar si había despedidos. Repudiamos el amedrentamiento contra los trabajadores”.
UN CONICET MILITARIZADO
Denunciamos el despliegue policial durante la mañana de hoy con el fin de amedrentar a lxs trabajadorxs de todo el del Polo Científico, obligando a formar una fila para corroborar si había despedidos.
Repudiamos el amedrentamiento contra lxs trabajadorxs pic.twitter.com/6CleRybpJT
— ATE CONICET Capital (@ATEConicetCABA) April 3, 2024
Conflictos en INADI y en la Secretaría de Trabajo
A lo largo de la jornada se reportaron una serie de conflictos tanto en el Instituto Nacional contra la Discriminación, el Racismo y la Xenofobia (INADI) como en la Secretaría de Trabajo. En la primera dependencia los trabajadores ingresaron al lugar tras forcejear con la Policía y, en el segundo caso, realizaron una retención de tareas por los empleados cesanteados.
El operativo de seguridad que se montó en las inmediaciones del INADI intentó frenar sin éxito a los trabajadores que ingresaron al organismo, traspasando los molinetes. Parte del personal declaró a la agencia NA que notificaron “casi 40 despidos” y que la policía, que estaba presente en el lugar, “tenía orden de reprimir”.
Muchos de los empleados se enteraron de su desvinculación en el mismo momento y otros recibieron, mediante correo electrónico institucional, la comunicación de la cesantía de sus contratos.
Uno de los testimonios que se viralizó fue el de una mujer, empleada del INADI, que había entrado a trabajar en el año 2008 y que le faltaban meses para jubilarse. “En mi legajo tengo los agradecimientos de todas las personas que beneficié con mis gestiones. Me quedo sin ingresos hasta que salga mi jubilación”, expresó la mujer.
En la misma línea, los trabajadores del ex Ministerio de Trabajo de la Nación, que actualmente es una de las secretarías que dependen del Ministerio de Capital Humano, hicieron una protesta con retención de tareas por 14 contratados a los que desvincularon sin motivo.
Nueva medida de fuerza
El secretario general de ATE nacional, Rodolfo Aguiar, advirtió que podría haber “una nueva medida de fuerza general antes de que termine esta semana” para repudiar los despidos de trabajadores estatales y criticó la militarización de ministerios y organismos públicos.
“Este fin de semana recibimos miles y miles de telegramas de despidos, en todos los casos ilegales y arbitrarios: son más de 11 mil despidos fehacientemente comunicados en todo el país”, sostuvo el dirigente sindical.
En declaraciones periodísticas, destacó que las ocupaciones pacíficas en ministerios y organismos públicos se dieron “a pesar de que el Gobierno decidió llenar de policías todas las dependencias públicas” y se quejó de que “para lo único que hay plata es para reprimir”.
Al final los estatales entramos de manera masiva y simultánea como había convocado ATE.
Me tocó presenciar uno de los momentos más conmovedores desde que asumí esta alta responsabilidad. Los despedidos ingresaban abrazados y llorando. El Presidente tiene que saber que esas… pic.twitter.com/9RcB3QRpJ0— Rodolfo Aguiar (@rodoaguiar) April 3, 2024
La palabra de Bullrich
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, ordenó un operativo de seguridad para custodiar los edificios públicos del Estado nacional en respuesta a una medida de fuerza de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE). El gobierno busca mitigar los alcances de la protesta en contra de los despidos de empleados estatales por medio de ingresos masivos a las dependencias públicas.
Según confirmaron fuentes de la cartera comandada por Bullrich, el objetivo es “custodiar todos los edificios federales”.
“No pueden usurpar algo que ya no tienen”, sostuvo la ministra en declaraciones a Radio Mitre, y defendió el operativo de custodia especial con agentes de la Policía Federal Argentina (PFA) y la Prefectura. “Nosotros vamos a estar protegiendo todos los bienes públicos”, dijo.
La dura advertencia del Gobierno
El Gobierno nacional monitorea el accionar de los trabajadores de ATE y su nuevo plan de lucha contra los despidos masivos de empleados públicos. Al respecto, desde Casa Rosada anticiparon que ante la toma de oficinas, la Policía Federal, la Prefectura y la Gendarmería, con jurisdicción para intervenir, no dudarán en reprimir y se realizarán denuncias.
El ministro de Defensa, Luis Petri, advirtió que los trabajadores que ocupen oficinas a pesar de sus despidos serán denunciados penalmente. “Los que intenten tomar edificios públicos van a ser denunciados penalmente y los vamos a llevar hasta las últimas consecuencias”, remarcó.
“Que se hagan responsables, llegó el momento que quienes cometen delitos se hagan responsables. El imperio de la ley es para todos”, agregó..