La Justicia de la Ciudad tomó intervención en un reclamo de garantía del derecho y acceso a la salud realizado por la familia de una beba que, a raíz de un diagnóstico de inmunodeficiencia combinada severa, requería un transplante de médula ósea antes del año de vida ante el creciente riesgo de mortalidad en el caso de no recibirlo.
Según informó la Asesoría Tutelar de la Ciudad, la niña, que actualmente cuenta con un año y medio de edad, evoluciona favorablemente luego haber podido ser trasplantada tras presentarse una acción de amparo y, lograr el dictado de una medida cautelar ordenando al Gobierno de la Ciudad a asumir los costos de atención en una institución privada debido a que en los hospitales públicos porteños no se realiza el procedimiento requerido por la paciente.
?El transplante debió hacerse en un hospital privado ya que en los públicos no se efectúa ese procedimiento en particular, pero no fue fácil llegar a lo que hoy es una realidad. El único familiar de la niña es su mamá y ambas venían de Entre Ríos, de una situación de vulnerabilidad socio-económica y sin contar con obra social. En principio, estuvo internada en el hospital de niños Ricardo Gutiérrez, entidad desde la cual se realizaron gestiones con la Casa de Entre Ríos sin resultados. Esto motivó la solicitud de intervención de la Asesoría Tutelar de Primera Instancia Nº 1 ante el fuero Contencioso, Administrativo y Tributario con el fin de resguardar el derecho a la salud y a la vida de la niña?, describe el órgano judicial que representa a los menores e incapaces en la Ciudad.
Ante la falta de respuesta del Ministerio de Salud a las solicitudes realizadas por la Asesoría Tutelar, se inicio una acción de amparo exigiendo que se ordene al Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires que cumpla con su obligación de prestar la debida asistencia, efectivizando su traslado a cualquiera de los centros privados que realice el transplante y asumiendo el costo total de todas las etapas que requiere dicho tratamiento. La jueza Elena Liberatori, respondió al planteo, y ordenó que en el término de 48 horas el Gobierno de la Ciudad -en articulación con el Ministerio de Salud- determine el centro médico en el que se llevaría a cabo el transplante de médula ósea.
La pequeña finalmente, y gracias a la intervención del INCUCAI que logró hallar un donante compatible en Australia, fue trasplantada en el Hospital Británico.