El ministro de Justicia y Derechos Humanos, Julio Alak, encabezó hoy la inauguración de un Centro de Acceso a la Justicia en el barrio porteño de Constitución y sostuvo que "en Argentina, por decisión de Néstor (Kirchner) y Cristina (Fernández de Kirchner), la justicia social es un deber a construir entre todos".
El Centro de Acceso a la Justicia y Casa de la Dirección Nacional de Readaptación Social lleva el nombre del ex presidente Néstor Kirchner y tendrá como objetivo asistir con un abordaje multidisciplinario a los sectores más vulnerables de la sociedad. De los organismos porteños, la Defensoría del Pueblo, a cargo de Alicia Pierini, es el único que participa de la iniciativa.
Durante su discurso, el ministro de Justicia pidió un aplauso y un reconocimiento para el ex primer mandatario, afirmó que "su aporte formidable a la transformación de la Argentina, con su decisión de tener un país autónomo, con justicia social, hizo posible este tipo de emprendimientos", y destacó la figura de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, "que hoy conduce el país con la misma firmeza que tuvo Néstor".
Según explicó Alak, este Centro, ubicado a 150 metros de la terminal ferroviaria de Constitución, es uno de los pocos que se encuentra fuera de villas o barrios precarios.
"Todos comenzaron en las villas, el primero en la 1-11-14, después en el resto de las villas de la Ciudad de Buenos Aires, acompañado por los Curas Villeros, que son militantes sociales que han elegido la religión para trasmitir su vocación social. Ellos nos han abierto las puertas".
El ministro relató, además, que a medida que se fueron inaugurando estos Centros, los profesionales que los atienden fueron detectando "que la gente no tenía documentos, que no había ciudadanía, y que no accedía a los planes nacionales, como jubilaciones y pensiones. Este ministerio no se podía dedicar como lo hizo históricamente a ver cómo se cubren las vacantes de la Justicia, tenía que ocuparse de las cuestiones sociales".
Por último, según consigna Télam, Alak parafraseó al ministro de la Corte Suprema de Justicia, Eugenio Raúl Zafaroni, cuando sostuvo "que la causa del delito no es la pobreza, ni lo es solamente la desigualdad. La causa del delito es la falta de un proyecto de vida", y convocó a los presentes a trabajar por la reinserción social de aquellas personas que han "pagado con pena la deuda con la sociedad, y que muchas veces son discriminados"
