Milei cerró la cumbre del CPAC: “Que los zurdos no nos entren por ningún lado”

Milei cerró la cumbre del CPAC: “Que los zurdos no nos entren por ningún lado”

El Presidente brindó un discurso que se centró en su lucha contra el socialismo.


El Presidente Javier Milei llamó el miércoles a dar la batalla cultural desde el poder porque sin el cuidado de las ideas “no importa qué tan buenos seamos gestionando, o cuán buenos seamos políticamente, no vamos a llegar a ningún lado”, aunque destacó que “se están respirando nuevos vientos de libertad y estamos ante una oportunidad histórica para empezar a cambiar el mundo”.

Al disertar en la Conferencia de Acción Política Conservadora en el Hotel Hilton de la Ciudad de Buenos Aires, el Presidente valoró el “rol fundamental” de la CPAC como “guardianes de las ideas” de la libertad, un espacio que “nos va a ayudar a que podamos coordinar internacionalmente para que los zurdos no nos entren por ningún lado”, como ocurrió en el pasado cuando “lograron imponer la agenda de lo políticamente correcto”.

En este sentido, el mandatario cuestionó los “experimentos” que “hemos padecido en la región” como los cuatro gobiernos kirchneristas en Argentina, Lagos, Bachelet y Boric en Chile, Lula Da Silva y Dilma Rousseff en Brasil, Gustavo Petro en Colombia, Pepe Mujica en Uruguay y Maduro en Venezuela, entre otros, además del “mentor de toda esta basura, Fidel Castro, y sus secuaces que hoy siguen en el poder”.

Pese a señalar que a diario la gestión ofrece “un montón de dificultades y adversidades”, Milei apuntó que “lo que marca siempre el norte es nuestra visión y eso es lo que tenemos que alimentar” porque es lo que “nos va a hacer resilientes, nos va a permitir enfrentar a los zurdos y ganarle en todos los terrenos y terminar de una vez por todas con la basura del socialismo”.

Luego de afirmar que “estamos haciendo el mejor gobierno de la historia” a pocos días de cumplirse el primer año de gestión, el Presidente apuntó que sus fórmulas para consolidar el poder “son un poco diferentes” a las que implementan los políticos profesionales, y que son “producto de la intuición y el aprendizaje”.

Además, cuestionó a los detractores de sus formas que “parece que fueron muy opositores al kirchnerismo pero perdieron siempre”, y apuntó que “más allá de las cuestiones estéticas, a la larga el extremo centro se manifiesta como lo que es: funcional a la izquierda criminal”.

La defensa a Santiago Caputo y a los influencers

Milei calificó a su asesor estrella Santiago Caputo como un “gigante” y otra vez hubo aplausos. Consideró que de “lo mejor de Santiago fue que no quería cambiarme”. Sin nombres propios, criticó a los “liberales de copetín” y se preguntó si “acaso se sentían mejor con el kirchnerismo”.

Otra de las premisas que dejó Milei fue considerar que “la única manera de convertir el mal organizado, es con el bien organizado” y recordó un concepto de Virgilio que sostiene que “no hay que ceder frente al mal, hay que combatirlo con más fuerza”.

Con duras críticas a los medios, Milei defendió a Daniel Parisini cuando se abrió una polémica sobre sus dichos de que eran “el brazo armado del presidente. Esa es la forma en que mienten los medios, que básicamente dijo que somos el brazo armado del presidente con el arma más poderosa, y sacó su teléfono. Miren la miserabilidad de los medios, cortaron los dichos del celular y empezaron a compararnos con los hijos de puta que mataban gente”. Y agregó: “Eso es de una deshonestidad intelectual enorme”.

Luego retomó su senda de dejar en claro sus máximas y consideró: “Esto se trata de poder y si no lo tenemos nosotros, lo tienen los zurdos de mierda”. Para luego decir que en LLA “el que se desordena, se va a su casa” y que “Roma no paga traidores”. Milei fue por más y consideró que “cuando el adversario es fuerte, la forma de vencerlo es ser mayor” y definió: “nosotros somos la reacción a cien años de atropello”.

El panel de “las fuerzas del cielo”

El primero en hablar del panel de “Las fuerzas del cielo” fue Romo, 28 años, que comenzó aludiendo a “cómo cambió el mundo desde que Milei habló en el foro de Davos”, donde, recordó “habló de que Occidente estaba en peligro”. Luego se remontó al “efecto” de Milei en los jóvenes, cuando irrumpió en la política. “Para ir contra la casta y los políticos del establishment”, mencionó Romo que poco después consideró al “Estado como una asociación criminal al servicio de los políticos” con “políticos cleptómanos a los que no les importa el pueblo”.

Diferenciándose de los políticos tradicionales, Romo también aseguró: “Nosotros defendemos la vida y ellos la muerte”. Después pidió aplausos para el titular de Economía, Luis “Toto” Caputo, que estaba en primera fila y también reclamó por la soberanía argentina en las Islas Malvinas y apuntó con críticas a la pelea por la agenda 2030.

Después fue el turno de Parisini, el “Gordo Dan”, quien mencionó que cuando habló de “brazo armado” del presidente lo hizo en alusión al celular, al que se refirió como el arma más poderosa. Un punto al que después volvió el presidente en su defensa de Parisini. El conductor de La Misa aseguró, en lo que fue la primera de una serie de críticas a los medios de comunicación, que en “las últimas siete décadas hubo “monopolio de micrófonos. Los grandes medios aprovechaban para instaurar falsas noticias”.

Luego consideró que hoy las redes “son el verdadero quinto poder” y que “desplazaron los medios tradicionales”. Parisini consideró que “una persona con su teléfono puede moldear el futuro del mundo” y aseguró que “a la izquierda no le gusta”. En esa línea ubicó a Brasil, Venezuela y a Europa.

Casi sobre el final levantó varias de las banderas del espacio, como “la defensa de la vida desde el momento de la concepción” y más adelante aseguró: “Nuestra campaña fue de las más austeras de la historia. No había dinero para carteles, ni para ensobrar periodistas”.

Luego fue el turno de Nahuel Sotelo, que aludió a la batalla cultural que lleva adelante Milei y, con duras críticas, apuntó a la Organización Naciones Unidas (ONU) y a la Agenda 2030, refirió a las “presiones” a la hora de las votaciones ante cada negociación. Más adelante dijo: “Los burócratas están asustados ante el avance de un presidente, tan firme como nunca se había visto”, del que, además consideró, “sus soldados, seguimos en marcha triunfal”. A él le siguió la exposición del diputado Santiago Santurio.

Te puede interesar

Qué se dice del tema...