"Nos hemos comprometido a incorporar dentro de la fábrica un establecimiento educativo, tal como hemos hecho en otras empresas recuperadas", adelantó el jefe de Gobierno porteño, Aníbal Ibarra, en el acto de reapertura de la Maderera Córdoba, este martes. La empresa quebró en el 2003 e inmediatamente doce ex empleados se organizaron para lograr la recuperación de las fuentes laborales, que ahora son 30.
En la reinauguración, que se realizó este martes, participaron, además de los trabajadores, el jefe de Gabinete de la Ciudad, Raúl Fernández; los secretarios porteños de Producción, Turismo y Desarrollo Sustentable, Eduardo Epszteyn, y de Educación, Roxana Perazza; la procuradora de la Ciudad, Alejandra Tadei; representantes del Movimiento Nacional de Empresas Recuperadas; y los legisladores Diego Kravetz, Ana María Suppa, Silvia La Ruffa (Frente para la Victoria), Roy Cortina (Partido Socialista) Laura Moresi y Alicia Caruso (Frente Grande).
Ibarra reivindicó la experiencia de los trabajadores "que lucharon para recuperar sus fuentes de trabajo, desafiando estructuras, prejuicios y posturas ideológicas contrarias y demostrando que son capaces de gestionar una empresa".
La Cooperativa Maderera Córdoba se dedica a la producción de productos en madera para la construcción y el hogar, con servicios de carpintería de medida y estándar, de maderas nobles y comunes, importadas y nacionales. "Está funcionando muy bien. Tiene muy buenas perspectivas de trabajo porque es un muy buen negocio y están muy bien organizados. Tanto es así que prontamente se van a incorporar diez fuentes laborales", aniticpó Kravetz, abogado del MNER.
La empresa fue fundada hace más de 40 años por Vicente Biglia y fue líder en su rubro, con 80 empleados. Pero cuando en diciembre de 2003 quebró, doce ex-empleados se organizaron en cooperativa y a fines de junio lograron que la Legislatura declarara el inmueble de utilidad pública y sujeto a expropiación.