¿Querrá el jefe de Gobierno porteño, Aníbal Ibarra, acrecentar en el 2005 el récord de normas vetadas con el que se alzó el año pasado?. Si es así, va por buen camino ya que, en lo que va de enero, publicó en el Boletín Oficial cuatro vetos más.
El primero de ellos es parcial. Ibarra decidió vetar los artículos 11 y 12 del proyecto por el cual se crea el Servicio de Orientación y Asistencia Interdisciplinaria en situaciones de crisis psicológica. Según los fundamentos del veto, la Secretaría de Salud considera que no resulta óptimo contar con este servicio en todos los hospitales de la Ciudad en forma permanente, sino sólo en aquellos que por sus características y ámbitos de atención cuenten con la capacidad y necesidad de respuesta necesaria, tales como hospitales generales de agudos, hospitales de salud mental y hospitales generales pediátricos.
Por otra parte, se considera exiguo el plazo de 30 días establecido para la reglamentación de la ley, porque "conspira contra la correcta y debida implementación del servicio propuesto, imposibilitando materialmente llevar adelante las reestructuraciones, modificaciones y medidas necesarias para su puesta en marcha".
En tanto, se vetó de forma total la iniciativa por la cual se le otorgaba un subsidio de 30.000 pesos a la Fundación Descida, entidad de bien público sin fines de lucro, a los fines de incrementar y mejorar las actividades propias de la institución. Entre las razones esgrimidas por el Ejecutivo para justificar su decisión consta que "no se desprende la conveniencia de destinar fondos públicos para subsidiar a entidades cuyos objetivos y tareas coinciden, en gran medida, con las propias funciones del Estado, destacándose además que, el beneficio otorgado alcanzaría sólo a una de ellas en desmedro de muchas otras organizaciones no gubernamentales que también llevan adelante actividades de prevención, rehabilitación y tratamiento del SIDA, colaborando de esa manera con el rol estatal".
También se desestimó totalmente el proyecto por el cual se crea el "Programa Porteño de Sostén Nutricional", a implementarse en recién nacidos prematuros, con posterioridad a su externación, tengan o no retardo del crecimiento intrauterino o post natal, nacidos en los Hospitales del Subsector Estatal.
Según el Jefe de Gobierno "existen suficientes experiencias en relación a la entrega generalizada de leches artificiales y su efecto negativo en la promoción de la lactancia materna, siendo que su aparente fácil administración privaría a la población con riesgo evolutivo, de una alimentación rica en elementos nutricionales e inmunológicamente activos en la prevención de enfermedades infecciosas".
Por último, se decidió vetar de forma total la iniciativa por la cual se establecía que el Poder Ejecutivo debería habilitar cuatro Salas Velatorias para personas de escasos recursos. Dos en el Cementerio de Chacarita y dos en el Cementerio de Flores. El veto se fundamentó, entre otras cosas, en que "la Dirección General de Cementerios cuenta con un servicio para personas de escasos recursos, fallecidas en hospitales, que incluye la provisión del ataúd, traslado, tramitación administrativa y la inhumación en sepultura sin cargo, coordinado por el Gabinete Social perteneciente a dicha repartición".
En una nota publicada recientemente, NOTICIAS URBANAS informaba que durante el 2004 Ibarra había vetado 23 normas de manera total o parcial, lo cual implicaba el récord de vetos desde que se creó la Legislatura porteña, superando por 10 los 13 vetos que había decretado en el 2003.
