Las Madres de Plaza de Mayo denunciaron esta mañana ante la justicia federal penal al ex presidente de la Nación Fernando de la Rúa por la golpiza que recibieron -de parte de la Policía Federal- siete de sus integrantes, durante la protesta social ocurrida el 20 de diciembre frente a la Casa Rosada y sus alrededores.
La acusación alcanzó también al ex ministro del Interior Ramón Mestre, al ex secretario de Seguridad Enrique Mathov y al ex jefe de la Policía Federal Rubén Santos. A todos se les imputaron los delitos de lesiones, abuso de autoridad y violación de los deberes de funcionario público.
La denuncia fue presentada para su sorteo en la Cámara Federal y quedó radicada ante el juez Rodolfo Canicoba Corral. Sin embargo las Madres pidieron que, "por conexidad", ésta sea adjuntada a la causa que, en relación con la represión policial ocurrida el 20 de diciembre, instruye la magistrada María Servini de Cubría.
"Las Madres fuimos golpeadas, pisoteadas por caballos y por hombres, sin contemplación alguna, con el deleite sádico de los canallas, estos anatomistas del dolor humano, tan cobardes como asesinos", manifestaron las querellantes en declaraciones periodísticas. Por su parte Hebe de Bonafini, presidenta de la agrupación, puntualizó que "los diputados y senadores, que estaban en el Congreso, no hicieron nada" y que eso había "que destacarlo" porque la represión "no duró cinco minutos".
Bonafini también afirmó que "ni en la época de la dictadura militar fue tan impresionante la embestida contra las Madres" y señaló que, mientras "por la espalda nos atropellaron con los caballos" de frente "teníamos a la guardia de infantería con los rifles con gases".
La titular de la agrupación fue una de las siete Madres que se presentaron en la causa como damnificadas directas de la agresión policial. Las otras seis fueron Marta Petrone de Badillo, Carmen Ramiro de Guede, Celia Pisani de Prósperi, Elsa Fanti de Manzotti, Evel Aztarde de Petrini y Elvira Lucía Díaz de Triana.
