El secretario de Transporte, Alejandro Ramos, manifestó que la decisión del jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, de cerrar la línea A de subterráneos “carece de sentido común, ya que afecta directamente a los miles de usuarios, y es totalmente innecesario”. “Afecta a todo el sistema de transporte del AMBA, ya que recarga los demás servicios”, explicó el funcionario nacional.
En el mismo sentido, Ramos criticó que “la medida no fue planteada, y mucho menos discutida en el ámbito de la Agencia Metropolitana de Transporte“. Al mismo tiempo recordó que “el gobierno nacional realizó las obras de renovación de vías, obras civiles, instalación eléctrica y señalamiento, sin la necesidad de cortar el servicio tanto tiempo”.
“La medida de Macri solo genera un impacto mediático y está lejos de mejorar el servicio”, disparó, e ironizó: “solo resta que ponga en funcionamiento las formaciones que también fueron compradas por el Estado nacional”, al aludir la inversión de 100 millones de dólares para la compra de 45 coches nuevos.