“La gente de Subterráneos de Buenos Aires (SBASE) nos dijo que debíamos quejarnos a Metrovías pero al mismo tiempo la concesionaria nos dice que fue el Gobierno de la Ciudad quien ordenó que la Línea A deje de funcionar por dos meses, con lo cual esto nos produce una terrible pérdida económica de la cual nadie se hace cargo, ni tampoco nos plantean que va a pasar con nosotros”, le manifestó a Noticias Urbanas un comerciante que tiene un kiosco de golosinas en la Estación Perú de la Línea A. Los comerciantes que tienen negocios en el subte le pagan un alquiler a Metrovías, con lo cual su situación es muy complicada.
“Si no nos dan una respuesta enseguida, estamos analizando muy seriamente la posibilidad de iniciar acciones legales contra Metrovías y contra la administración porteña”, agregó el comerciante consultado.
Desde el primer día de enero el gobierno porteño a cargo de Mauricio Macri y a través de Subterráneos de Buenos Aires Sociedad del Estado (Sbase) se hizo cargo de las seis líneas de subterráneos y el Premetro y su primera medida fue cortar el servicio de la Línea A por un plazo de dos meses para cambiar los antiguos vagones por unos más modernos.
Desde la Jefatura de Gobierno se aseguró que la medida beneficiara a los usuarios, ya que mejorara considerablemente el servicio, sin embargo la decisión despertó airadas críticas desde diversos sectores, tanto de funcionarios del gobierno nacional como de los del sindicato de metrodelegados, que agrupa a la mayoría de los trabajadores del subte.
La crítica más frecuente es la que plantea, como lo dijo el ministro de Interior y Transporte de la nación, Florencio Randazzo, que para el servicio era “una locura”, que sólo perjudicaba a los usuarios y a los comerciantes.
Por el lado de los metrodelegados se acusó al gobierno capitalino de mentir, ya que según ellos cambiar todas las formaciones de la Línea A por otras más nuevas se puede hacer un un plazo de una semana.
Pero la medida también, afecta de manera directa a los comerciantes que tienen distintos tipos de locales en las estaciones de la Línea A. Todos ellos pagan un alquiler mensual a la concesionaria por esos locales, ya que dicha empresa es la que esta a cargo de los subterráneos, con el parate de dos meses las pérdidas son cuantiosas y hasta ahora ni Metrovías ni el Gobierno de la Ciudad les dijeron que iba a pasar con ellos.
Tampoco se habla de un resarcimiento económico, ni qué va a pasar con el alquiler de enero y febrero, por lo cual varios comerciantes se están reuniendo para tomar una decisión en conjunto.