La polémica por las dietas en el Congreso volvió a aparecer en escena. El fuerte autoamento otorgado por diputados y senadores nacionales, del 21.8 por ciento, motivó las críticas desde distintos sectores.
El punto de mayor rispidez tiene relación con los casi dos puntos con el que el Gobierno aspira a cerrar este año las paritarias, al tiempo que supera el 17% que el Gobierno les ofreció a los docentes nacionales.
A partir de ahora, cobrarán 36.382 pesos mensuales, a los que se deben sumar otros 10.000 pesos por mes por gastos de representación.
Cada legislador recibe desde enero una suba de $ 6500 en promedio en sus dietas. Esto lleva a un ingreso de bolsillo de $ 46.382 mensuales, sumados los gastos de representación.
Desde el Congreso, empero, informaron que el aumento es producto del acuerdo paritario que se alcanzó en marzo del año pasado con los gremios legislativos. El incremento se aplicó automáticamente para los empleados, pero se postergó para diputados y senadores hasta el 1° de enero de este año.
A esta suma se le deben agregar el plus por desarraigo que perciben aquellos que viven en el interior del país y los 40 tramos terrestres y aéreos que reciben por mes, los cuales pueden ser canjeados por dinero en efectivo si no se utilizan. Cada tramo terrestre cuesta 220 pesos, mientras que el aéreo, 530 pesos.
La única mala noticia es que una porción importante de sus ingresos -entre 12.000 y 16.000 pesos mensuales- se los lleva el Estado por medio del impuesto a las ganancias.
LA PALABRA DE VICTORIA DONDA:
La diputada de Libres del Sur tildó de “correcto” el aumento porque está “en la misma escala” de la mejora lograda por los trabajadores parlamentarios.
Además, indicó que el incremento demuestra “la mentira del piso que quiere poner el Gobierno acerca de las paritarias” y señaló que hay una resolución firmada por los legislativos y ambas cámaras parlamentarias que “atan” el aumento de las dietas al resultado de la negociación salarial de los trabajadores.
En declaraciones a Radio 10, Donda recordó que el año pasado no se respetó ese acuerdo cuando diputados y senadores se aumentaron el 100 por ciento sus salarios y ella protestó por eso.
Por último, destacó que “si a los trabajadores del Congreso se les otorga el 21 por ciento de aumento es porque no puede haber un piso para paritarias y mucho menos un techo límite para paritarias en momento de una gran inflación”.