Un día después de que el Gobierno porteño presentara los nuevos vagones chinos que funcionarán en la Línea A (cerrada hasta el 9 de marzo próximo), el delegado gremial, Roberto Pianelli volvió a insistir con que “no era necesario” suspender el servicio y que “no hubo obras como para haber tenido que cerrar la línea”.
Entre las novedades más destacadas de las nuevas formaciones, aparecen el sistema de seguridad a implementar (tiene que ver con las señales de alerta) y el aire acondicionado. “Hay que integrar ese sistema, todo eso no está”, criticó el metrodelegado.
Respecto a la cantidad de trenes que se van a utilizar de ahora en más, funcionarán 11, 7 menos que los que había anteriormente. “No se van a habilitar Plaza Flores y Nazca porque no alcanzan los trenes”, cuestionó.
Por último, Pianelli -cercano a la Casa Rosada- aseguró que “esto se hace porque el Gobierno nacional le dejó todo listo para concretarlo”. “Macri va a inaugurar algo que hicieron otros”, indicó.
LAS EXPOSICIÓN DEL MACRISMO:
Según publicó Clarín en la edición de hoy, las formaciones tienen las ventanas cerradas herméticamente, lo que impide el ingreso del sonido y aumenta el confort, además de un andar uniforme, sin sobresaltos. Las cámaras de seguridad, dos por coche, permiten ver el conductor desde la cabina, e intercomunicador para que los pasajeros puedan hablarle. El interior es blanco, los asientos son de plástico, con dos cojines por cada ubicación, y un barral vertical frente a las puertas, para que la gente que queda parada en medio tenga de donde agarrarse. Los carteles indicadores son electrónicos y hay anclajes para las sillas de ruedas o los carritos de bebés.
Son nueve formaciones de cinco vagones cada una, que fueron compradas por el Gobierno nacional después de un año de tironeo con el macrismo y previo al traspaso del servicio que se concretó el 1° de enero. “Seis ya fueron chequeadas y recorrieron al menos 500 kilómetros, que son los que demandan los estándares de seguridad”, explicó ayer el jefe de Gobierno, Mauricio Macri.
En la presentación estuvo acompañado por su vice, María Eugenia Vidal, el Jefe de Gabinete, Horacio Rodríguez Larreta, y Juan Pablo Piccardo, presidente de SBASE, la empresa de la Ciudad que construye la ampliación del subte y será la encargada de gestionar la compra de otros 120 vagones.
Tras confirmar la reinauguración del servicio para el 9 de marzo, los funcionarios explicaron que se realizaron pruebas para saber cómo funcionan los sistemas neumáticos y eléctricos de los coches, las luces, el frenado, el cierre y apertura de puertas y se avanzó con la capacitación de los conductores y los guardas.Respecto del sistema de seguridad que dispara el freno de emergencia, Piccardo aseguró que “está siendo colocado en todos los coches”
Éste, precisamente, fue quien indicó que “no hubo que modificar ni achicar los andenes”, en referencia a la filmación que circuló y en la que se mostraba que los vagones tocaban los bordes: “Para impedir que las formaciones nuevas toquen alguna saliente que pudiera existir, tanto en los túneles como en los andenes, se la recubre con una estructura de madera. Una vez que se prueba que todo esta bien, se quita. No hubo que hacer ninguna modificación”, explicó.