Desde las siete de la mañana de este jueves, distintas dependencias del Gobierno porteño se aprestaron a coordinar el desmantelamiento de varias casillas (algunas de cemento y otras más precarias de cartón) que forman parte del asentamiento Rodrigo Bueno, ubicado en la Costanera Sur junto a la entrada de la Reserva Ecológica.
"Unas 180 familias voluntariamente aceptaron el subsidio por nosotros ofrecidos. Podían aceptar un subsidio de 20 mil pesos por familia o un crédito hipotecario; en un 85 por ciento aceptaron el subsidio", informó a NOTICIAS URBANAS el subsecretario de Desarrollo Social, Sergio Beros.
El funcionario, que se encontraba en el asentamiento, aseguró que la jornada se desarrolló con totalidad normalidad y que no hubo ningún tipo de incidentes con la población del lugar.
El operativo del que participaron, según fuentes gubernamentales, personal de SAME, Defensa Civil, Registro Único de Beneficiarios (PRU), Guardia de Auxilio, veterinarios y Policía federal, es la efectivización de un decreto que establece mudar a los habitantes para recuperar terrenos para la Reserva Ecológica.
Muchas de las familias que formaron y forman parte del asentamiento provienen de diversas provincias de nuestro país y otras personas de países limítrofes, en su mayoría de Paraguay. Ellos empezaron a ocupar el terreno de 500 metros de largo y 200 de ancho en 1986.
"No es un desalojo, las familias se inscribieron, les entregamos un cheque y hasta los acompañamos a cobrar al Banco Ciudad. Los camiones trasladan los muebles y Defensa Civil procedía a derribar las casas de material y a las precarias las desarmaba. El 95 por ciento de las personas retornaron a sus provincias de origen, en el caso de los paraguayos su destino fue Misiones y otros pocos transitoriamente aceptaron un subsidio de 500 pesos para que puedan pagar un alquiler. Aproximadamente 8 millones de pesos en subsidios invirtió la Ciudad y unos 500 mil en logística, ello incluye el traslado de los muebles y los materiales del interior de las viviendas", agregó el funcionario porteño.
Tal como informara esta agencia, la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH) presentó un amparo ante el Juzgado en lo Contencioso y Administrativo Nº 4 para que se urbanice el asentamiento Rodrigo Bueno.
La jueza que entiende en la causa, Elena Liberatori, hizo lugar al recurso de amparo y dictó una medida cautelar que obliga al Gobierno de la Ciudad a garantizar a los habitantes de la villa "condiciones dignas de habitabilidad". La decisión judicial frenó la construcción de un terraplén que se estaba levantando en la Reserva Ecológica y obligó a la gestión de Aníbal Ibarra a mantener la limpieza del barrio, así como la provisión de luz y agua potable.
"No estamos incumpliendo lo determinado por la justicia ya que estas personas aceptaron voluntariamente retirarse. Lo que sí no construimos es el terraplén, y lo que sí está establecido es un servicio precario de luz y agua".