Personal de la comisaría 45ª recibió en la tarde del miércoles el llamado del padre del encargado de un edificio de Baigorria al 4100 (Villa Devoto), advirtiendo que no obtenía respuesta cuando intentaba comunicarse con la familia. Al llegar al lugar, los policías encontraron al hombre, que ya había llamado a un cerrajero.
Al abrir la puerta, descubrieron ocho cuerpos dispersos en los distintos ambientes del departamento. Entre las víctimas hay cinco chicos y una mujer embarazada.
Las primeras observaciones del personal especializado de la Policía determinaron que la familia habría muerto por la inhalación de monóxido de carbono proveniente del calefón que estaba en mal estado.
Cuando los policías entraron al departamento, la ducha estaba abierta y el calefón apagado, según señaló el comisario de la 45ª, Daniel Moreno. En ese sentido, el policía aseguró que "se ve que se quisieron bañar durante la noche y ocurrió esta desgracia".
Según la agencia Télam, el portero muerto se llama René Ortega, de 41 años. Junto a él fueron hallados los cuerpos de su mujer (35 años), embarazada de varios meses, y tres hijos de ambos, uno de ellos de 11 meses. También se encontró el cadáver de su ex mujer, de 45, quien había ido de visita con los dos hijos del matrimonio anterior.