El juicio por la detención ilegal y posterior muerte del adolescente Walter Bulacio, cuando intentaba asistir al recital de Los Redonditos de Ricota en el estadio Obras Sanitarias, en 1991, comenzará este martes y tendrá como principal imputado al excomisario Miguel Ángel Espósito, quien será juzgado por “privación ilegal de la libertad” pero no por “el homicidio” del adolescente.
El juicio, previsto para las 10 en Paraguay 1536, de esta Capital, estará precedido de un acto y movilización organizados por la Coordinadora contra la Represión Policial (CORREPI) que tendrá lugar a las 9 en la plaza situada en Paraguay y Callao, desde donde marcharán al tribunal.
Un centenar de testigos, en su mayoría aportados por la defensa y la fiscalía, fueron citados a declarar y se prevé que la condena se dé a conocer a fines de octubre, cuando se cumplan 22 años y 6 seis meses de la muerte del joven.
La pena máxima a la que aspira la querella es a seis años de prisión, mientras que “si se juzgara a Espósito por torturas seguidas de muerte, la pena sería de cadena perpetua”, explicó la abogada de la familia del joven asesinado, María del Carmen Verdú.
En la primera jornada del juicio se escuchará la palabra de Graciela Scavone, la mamá de Walter, quien será uno de los pocos testigos que presentará la defensa.
Bulacio fue detenido el 19 de abril de 1991, junto a otros 73 jóvenes, cuando se disponía a ingresar al estadio Obras Sanitarias y murió al día siguiente.