En el bunker del Frente Renovador en Tigre comenzaron a desfilar los candidatos y miembros del equipo de campaña, y el primero en abrir la pasarela fue quien secunda en la lista a Sergio Massa, el intendente de Almirante Brown, Darío Giustozzi.
En diálogo con los medios, Giustozzi dijo que con esta elección se demuestra que “el kirchnerismo perdió el contacto con la agenda de la gente, lo que era un rasgo significativo de ellos en sus comienzos”.
“Hoy eso lo tenemos nosotros. Queda en el pasado un viejo estilo y nace otro”, enfatizó el intendente, que no se sonrojó al calificar de “epopeya” el virtual triunfo massista.
Por su parte, uno de los jefes de campaña del FR, Juanjo Álvarez, expresó luego su “preocupación por hechos de violencia” sucedidos en los municipios de Merlo y de José C. Paz contra fiscales massistas.
“Hubo amenazas con armas blancas contra nuestros fiscales”, agregó sin brindar mayores detalles a excepción de que el FR ya había radicado la denuncia en sucursal policial.
Sugestivamente, Álvarez apeló “al gobierno de la provincia de Buenos Aires y a los responsables del conteo de los votos” para evitar mayores conflictos, pero no mencionó al Ejecutivo nacional.
También Felipe Solá destacó el probable amplio triunfo massista y consideró que “finalmente, fue David contra Goliat”.
Previamente ratificó en diálogo con NU que la diferencia que maneja el FR con fuentes propias es “de diez puntos como mínimo” con respecto al kirchnerista Martín Insaurralde y le bajó el tono a los problemas en el conteo de los votos excepto en los lugares puntuales denunciados por Alvarez.
Estaba previsto que pasen varios integrantes de la lista a realizar ruedas de prensa hasta las 21.30, cuando hable Massa con los primeros los resultados oficiales en mano.
Mientras tanto, era gradual la concurrencia de militantes al predio del Complejo Pipa, aunque las butacas reservadas ya estaban casi todas ocupadas, mientras la música llenava un salón por ahora semivacío.