El jefe de Gobierno de la Ciudad, Mauricio Macri, encabezó este martes el acto de graduación de la cuarta promoción de cadetes de la Policía Metropolitana, que sumó 900 oficiales al servicio, y les pidió que “defiendan la ley y den seguridad, que es dar libertad”.
“Los argentinos merecemos vivir tranquilos y sentirnos seguros en nuestro país y ustedes cumplen un rol fundamental. Con la Metropolitana duermo tranquilo porque confío en ellos”, subrayó en el Instituto Superior de Seguridad Pública (ISSP), en el Bajo Flores.
En esa línea sostuvo que “el crecimiento de la fuerza es una muy buena noticia para las millones de personas que viven y trabajan en la Ciudad” y destacó que “tiene una convicción, un compromiso y una cercanía que marca una enorme diferencia”.
Respecto a la tarea de los funcionarios de Gobierno, señaló que “nos comprometimos para que tengan lo mejor, con acceso los mejores profesores, equipamiento, tecnología, entrenamiento y salario digno”.
Y añadió: “Por eso, es un gran orgullo para mí haber escuchado que el ejemplo a imitar es la Policía Metropolitana”.
A su turno, el ministro de Justicia y Seguridad porteño, Guillermo Montenegro, recordó a los policías caídos y afirmó que “una ciudad entera trabajó para que ustedes integren un cuerpo policial muy importante para la seguridad de los vecinos”.
Por su parte, el jefe de la fuerza, Horacio Giménez, recordó el compromiso de los oficiales “de trabajar, ayudar y estar siempre presentes y cerca de la gente”.
El acto también contó con la presencia de la vicejefa de Gobierno, María Eugenia Vidal; el jefe de Gabinete, Horacio Rodríguez Larreta; el ministro de Desarrollo Urbano, Daniel Chain, y el subjefe de la Metropolitana, Ricardo Pedace, además de legisladores y diputados nacionales porteños.
NUEVOS OFICIALES:
550 se formaron íntegramente en el ISSP, en tanto que 357 ya contaban con experiencia en la tarea policial, con lo cual la fuerza porteña pasó a tener un total de 5000 efectivos.
Los nuevos efectivos prestarán servicio en todos los espacios de la Ciudad en donde tiene presencia la Metropolitana: las comunas 4 (Nueva Pompeya, Barracas, La Boca y Parque Patricios), 12 (Coghlan, Villa Urquiza, Saavedra y Villa Pueyrredón) y 15 (Chacarita, Villa Crespo, La Paternal, Villa Ortúzar, Agronomía y Parque Chas), en el centro porteño, en los corredores del Metrobús y en los circuitos turísticos.
Gran parte de estos efectivos van a brindar seguridad a los pasajeros del subterráneo para prevención y disuasión del delito, en forma coordinada con las fuerzas federales.
Los cadetes tienen entre 18 y 29 años, un promedio de edad de 25 años, 64 por ciento de ellos son hombres y el 36 por ciento mujeres.
La fuerza está conformada aproximadamente en partes iguales por hombres y mujeres.
Los nuevos oficiales con experiencia fueron formados a lo largo de un año en el ISSP, donde, además del entrenamiento tradicional, se los capacitó en derechos humanos, legislación porteña y en la aplicación de las constituciones de la Nación y la Ciudad de Buenos Aires.
También recibieron instrucción para actuar ante casos de violencia de género y durante su preparación asistieron a clases teóricas en las que tuvieron como profesores a jueces y fiscales de los tribunales porteños.
En la ceremonia se entregaron reconocimientos para “el mejor promedio”, “el mejor esfuerzo” y “el mejor compañero” y distinciones a quienes participaron de las competencias deportivas y obtuvieron medallas en el mundial de Policías y Bomberos realizado en Irlanda, y los Juegos Latinoamericanos llevados a cabo en Córdoba.
En otro orden de temas y como parte de un operativo de prevención, el secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni, anunció que la policía porteña fue incorporada al comando especial ya creado con la Bonaerense para prevenir posibles saqueos en la Ciudad.
