La inflación vuelve a golpear no sólo el bolsillo de los usuarios sino que en el caso del subte, los gastos se incrementarán este año a partir de los costos operativos y la realización de obras para mejorar la infraestructura: demandará al Gobierno porteño 10,2 millones diarios.
De esta manera, se necesitarán juntar $ 3.750 millones para afrontar los gastos de funcionamiento y las inversiones prioritarias programadas para la red de subterráneos y el premetro. El 30% lo pondrán los usuarios del servicio a través del pago de pasajes y el 70% restante se cubrirá con recursos presupuestarios de la Ciudad y los impuestos específicos que pagarán los contribuyentes porteños.
Respecto a los gastos de operación y mantenimiento rondarán los $ 2.300 millones, informa Clarín. Ese monto contiene un ajuste del 24% con respecto a lo desembolsado en 2013 con el fin de atender los mayores costos operativos y salariales.
A partir del nuevo cuadro tarifario, que comenzará a aplicarse en marzo y pasará a costar cinco pesos, se prevé recaudar unos 1.100 millones de pesos, informa Clarín.
LÍNEA H:
Se destinarán $ 1.450 millones que provendrán de las siguientes fuentes:
– El fondo “Subte” –que fue aprobado por la Legislatura porteña a fines de 2012 para financiar el traspaso del servicio de la Nación a la Ciudad– aportará $ 650 millones. Esos recursos salen de una parte de los peajes de las autopistas urbanas, del impuesto a los sellos y de un pago extra en las patentes de los autos de alta gama.
– Otros $ 500 millones los pondrá SBASE –la empresa estatal porteña que administra los subtes– de su propio presupuesto.
– Y los $ 300 millones restantes llegarán del fondo creado por la ley 23.514 –impulsada por el ex ministro radical Nicolás Gallo– que se alimenta con una porción de las patentes y del impuesto inmobiliario (ABL).