Luego de reunirse con Mauricio Macri y Hermes Binner, el sindicalismo opositor al Gobierno nacional, encabezado por Hugo Moyano y Luis Barrionuevo sigue con su ronda de diálogo.
El titular de la UCR y precandidato presidencial Ernesto Sanz, los recibió en el comité central del partido. Acompañado nuevamente del exvicepresidente Julio Cobos, el excandidato presidencial Ricardo Alfonsín y de los jefes de bloque de diputados y senadores, Mario Negri y Gerardo Morales, Sanz buscó mostrar un radicalismo unido y abierto al diálogo.
Sin dudas, la presencia de Cobos no fue un dato menor luego de la polémica originada en el seno del radicalismo cuando éste fue excluido de la mesa multipartidaria que busca consolidar un frente progresista no K.
El temario del encuentro rondó en torno a la inflación. El líder de la CGT Azopardo, Hugo Moyano, advirtió: “El Gobierno quiere hacer el ajuste a costa de los trabajadores. La preocupación es la inflación, no son las paritarias”.
Una vez consumado el encuentro, la UCR y el sindicalismo opositor a Cristina Kirchner se mostraron coincidentes y acordaron trabajar en conjunto en el ámbito legislativo para “contribuir” a mejorar la marcha del país.
A su vez, le pidieron al gobierno nacional que salga del “encierro y la tozudez”.
En sintonía con esta ronda de diálogo abierta por el sindicalismo no alineado, el próximo objetivo del líder camionero es reunirse con Pino Solanas y demás dirigentes de UNEN.
A pesar de la oposición de Elisa Carrió al encuentro con quienes considera “deberían estar sentados frente a un juez”, Solanas se muestra favorable al “café”.
Hasta ahora, los únicos que le dijeron que no a una foto con los sindicalistas fueron Sergio Massa, Daniel Scioli y José Manuel De la Sota. Paradojas de la vida.
