Walter Santalla, junto al presidente de la UCR de Baradero, Julio Scollo, esperaron el sábado a Sergio Massa en el pequeño aeropuerto ubicado en el partido de Ramallo, donde tenía lugar la feria rural Expoagro, la cual el diputado visitó luego.
Así fue que tomaron un café durante un rato y conversaron, como lo viene haciendo el intendente de Ramallo desde noviembre pasado con el jefe del Frente Renovador. Aunque que el pase de la UCR al massismo no se termina de concretar.
“Santalla es medio gelatinoso. Va y viene. Pero es una especulación válida, porque son pocos los que se juegan y se van de su partido, sea por cuestiones de gestión incluso, lo más cómo es seguir así como están”, dijo una fuente massista que estuvo presente en ese encuentro, en diálogo con Noticias Urbanas.
Santalla es la cabeza visible del radicalismo bonaerense de la Segunda Sección electoral, la cual tiene casi medio millón de votantes y aglutina a la denominada “superpampa”, con las tierras más fértiles de la Provincia, cuyo corazón es Pergamino.
Desde el Frente Renovador señalaron que el pase de Santalla, de concretarse, podría ser recién a fin de año. Una mala noticia para Massa, quien destinó denodados esfuerzos para incorporar intendentes radicales a su partido para ampliar su base política.
Sin embargo, el premio consuelo podría venir de la mano de la Patagonia: algunos massistas aseguran que es inminente la oficialización del acuerdo con “Pechi” Quiroga, el intendente radical de Neuquén.