En su recorrida por Europa y tras entrevistarse con el papa Francisco, la Presidenta tuvo su audiencia con su par de Francia, François Hollande. El conflicto por Malvinas, en el centro de la escena a propósito de la discusión por el conflicto territorial e internacional que afecta Ucrania.
“Reclamamos a las potencias que cuando se habla de integridad territorial, sea aplicable para todos, porque mi país sufre el cercenamiento territorial por parte del Reino Unido de las Islas Malvinas, y sin embargo, las grandes potencias, fundamentalmente el Reino Unido y Estados Unidos, se han manifestado a favor del referéndum que los kelpers han hecho y que carece de todo valor“, precisó.
La mandataria incluso diferenció que “las Malvinas siempre pertenecieron a la Argentina” mientras que “Crimea hasta el 19 de febrero de 1954 pertenecía a la Unión Soviética y le fue obsequiada por Nikita Kruschev a Ucrania”.
En esa lógica, planteó que “o respetamos los mismos principios para todos, o vivimos en un mundo donde no hay derecho, donde no hay respeto a lo que decimos, sino que prima la relación de los más fuertes”.
También sobre el tema del archipiélago, el secretario de Asuntos Relativos a las Islas Malvinas, Daniel Filmus, afirmó que “el pueblo argentino no concibe que en pleno siglo XXI parte de su territorio esté en manos de una potencia colonial”.
En una nota publicada hoy en Inglaterra por el matutino The Daily Telegraph, el funcionario subrayó que “la cuestión de las Islas Malvinas es uno de los ejes centrales de nuestra política exterior”.
Filmus recordó que hubo negociaciones bilaterales “entre 1966 y 1982”, y remarcó que “es necesario reiniciar tal proceso“.