Por Daniel Galvalizi
Eugenio Burzaco ya mandó las señales de humo pertinentes y en la pequeña pero dinámica comunidad política de San Isidro ya se comenta: el ex titular de la Policía Metropolitana macrista pondrá en marcha un armado para enfrentar al ministro de Seguridad de la Ciudad, Guillermo Montenegro.
De bajo perfil, Burzaco se dedica ahora a la actividad privada (es el CEO de una empresa de seguridad) aunque expresó su voluntad de volver al ruedo político en donde reside. Toda su vida vivió en la localidad de Martínez, mientras que su futuro rival interno Montenegro es de La Horqueta, detalle que para la política local no es menor.
Burzaco fue diputado nacional por el Pro en el período 2005-2009 y gestionó los comienzos de la Metropolitana entre 2009-2011. Hijo del fallecido ex secretario de Medios de Carlos Menem, Burzaco fue señalado por algunos opositores como empleado de la SIDE durante la Alianza y tras no ser elegido como ministro porteño de Seguridad, tuvo acercamientos que no prosperaron con el denarvaizmo.
Montenegro, por su parte, asegura que será candidato en San Isidro y se muestra confiado del resultado electoral, además de contar a su favor con el dinámico armado político de Pedro “Píter” Robledo, referente de la Juventud Pro y precandidato a diputado provincial por la Primera Sección.
Desde el massismo disfrutan esta división, en sus dos vertientes: la del intendente Gustavo Posse y la del senador bonaerense Sebastián Galmarini, cuyos espacios en las últimas elecciones fueron divididos pero obtuvieron sumados poco menos de dos tercios de los votos de la comuna.
“Burzaco le comunicó su intención al presidente del Concejo Deliberante”, dijo a NU una fuente del possismo, a la vez que dejaron trascender que “no hay trabajo territorial de Montenegro” en el partido y que básicamente lo que mueve el Pro localmente se lo debe a Robledo.