Sumidos en un clima que aún no terminó de aquietarse, ya que la aceptación de la oferta salarial no fue absoluta, los docentes bonaerenses volvieron a las aulas este lunes. Las asambleas que se realizaron entre el viernes y el sábado ratificaron la aceptación de la escala de sueldos que les ofreció Daniel Scioli y permitieron el fin de una huelga que duró 18 días.
El 92 por ciento de los afiliados a SUTEBA -según afirmó su secretario general Roberto Baradel, se mostró favorable a responder en forma afirmativa a la oferta de Daniel Scioli, en tanto que la secretaria general de la Federación de Educadores Bonaerenses, Mirta Petrocini, informó que el 70 por ciento de sus afiliados respondió de la misma manera.
Tras la realización de las asambleas, que se realizaron el viernes -Baradel informó que 117 de las 129 reuniones aceptaron el acuerdo-, el sábado los plenarios de secretarios generales de los dos gremios mayoritarios votaron igualmente por el levantamiento de las medidas de fuerza, aunque en algunas seccionales opositoras al oficialismo rechazaron el acuerdo y hubo algunos incidentes aislados.
El gobierno provincial informó que el incremento ronda el 30,9%. Esta suma será liquidada en dos cuotas, que se pagarán entre marzo y agosto, sin descontar los 18 días de paro. El sueldo inicial de un docente será de $ 5000 -hasta hoy es de $ 3600- y habrá actualización para las asignaciones familiares y para los jubilados.
La voz discordante
El gremio que lidera Miguel Díaz, la Unión de Docentes de Buenos Aires (UDOBA), por su parte, se negó a firmar el acuerdo. “Denunciamos la mentira del gobierno, que se niega a invertir. Faltan $ 20.000 millones en educación y el gobierno no los quiere poner. Sólo un payaso o un traidor puede negociar esa cifra, que supone para el maestro un aumento de $ 240. Nosotros continuamos en paro”, disparó Díaz, que responde a Hugo Moyano.