El debate sobre la prohibición de los denominados “trapitos” se volvió a instalar en la Legislatura porteña. El proyecto del Pro que busca prohibir en el ámbito de la Ciudad la actividad de cuidacoches y de limpiavidrios sin autorización legal se comenzó a analizar este miércoles en la Comisión de Justicia.
La iniciativa del macrismo fue rechazada en dos oportunidades por la oposición y se volvió a presentar en noviembre del año pasado luego de que una pelea entre “trapitos” dejara a un hombre muerto. Ahora, se prevé que será analizada en profundidad por varias, con la participación de vecinos y especialistas, indicaron desde el Pro.
El proyecto de ley del Vicepresidente I del Cuerpo, Cristian Ritondo y el legislador Roberto Quattromano busca que quien realice esa actividad en la vía pública sin autorización legal sea “sancionado de 1 a 5 días de arresto o multa de 200 a 2000 pesos”. “Cuando exista previa coordinación, la sanción se eleva al doble para quienes de cualquier modo participen en la misma. La sanción se eleva al triple para los organizadores o jefes de la organización.”
El proyecto modifica el Artículo 52 del Código Contravencional de la Ciudad y establece que “quien intimide u hostigue de modo amenazante o maltrate físicamente a otro, siempre que el hecho no constituya delito, será sancionado con 5 a 20 días de arresto”.
Según Ritondo, con esto se busca “agilizar los procedimientos de modo que quien cometió una contravención flagrante reciba una condena rápida sin detrimento alguno de sus derechos constitucionales de debido proceso legal y defensa”.
La iniciativa introduce una modificación en la Ley de Procedimientos Contravencionales “para que la resolución de las causas sea más rápida y menos burocrática y lograr que ante un caso flagrante de contravención se llegue a una resolución efectiva en un plazo no mayor a las 48 horas”.