“No tenía ninguna idea formada”, cuenta Juan Francisco Nosiglia sobre el funcionamiento del Palacio Legislativo porteño, que integra desde diciembre de 2013, cuando asumió como legislador del bloque Suma+, dentro del interbloque Unen. “El Estado tiene sus tiempos y en algunos aspectos a uno le gustaría que algunas cosas se desarrollaran con menos trabas; pero hay buena vocación de muchos diputados de todos los bloques”, agrega.
En su despacho del cuarto piso recibe a Noticias Urbanas y el primer tema es el lanzamiento del Frente Amplio Unen: “Lo viví con mucho entusiasmo, alegría, mucha expectativa. Es un paso importante en la consolidación de este nuevo espacio político que estamos conformando y que, de alguna manera, ya habíamos empezado a conformar en la Ciudad”, relata.
–En cuanto a los nombres de la foto del martes, ¿le parece que falta alguien, o que sobra alguno?
–La foto del martes es la foto del Frente que hoy tenemos, que me conforma absolutamente. Es por lo que nosotros, los más jóvenes del radicalismo, venimos militando hace mucho tiempo: consolidar un espacio de centroizquierda y empezar a caminar el camino que hace mucho tiempo empezaron a recorre las fuerzas progresistas en lugares como Uruguay, Chile o Brasil. El Acuerdo Cívico y Social había sido un primer paso que no pudimos consolidar, pero me parece que en esta etapa hay mejores condiciones.
–Volvamos a los nombres, ¿cuál es su opinión sobre la inclusión o no de Mauricio Macri dentro del FAU?
–Es un tema del que están más pendientes los medios y los formadores de opinión que los dirigentes y la sociedad. Unen fue la sorpresa de las elecciones el año pasado a pesar de la subestimación de los mismos medios que hoy quieren poner en discusión “Macri sí o Macri no”, que no es una discusión que se esté dando en el Frente. Hay un acta constitutiva, con un perfil vinculado a los valores del progresismo. Quienes quieran suscribirla, pueden hacerlo. Si Macri de repente cambia su forma de pensar y está dispuesto a suscribir un acta de perfil progresista, se verá llegado ese momento.
–En los comicios de 2013 Suma+ dio el batacazo con la inclusión de Martín Lousteau, ¿en 2015 puede ser el candidato del espacio a jefe de Gobierno?
–Martín es un emergente, es el referente del espacio, con muchísimo futuro, de una capacidad e inteligencia que hacen que se destaque sobre otros dirigentes. Recién asume como diputado, pero seguro que muchos están pidiendo que Martín tome un protagonismo más importante y sea candidato a jefe de Gobierno en 2015, pero no es el momento de decidirlo.
–Existen dos proyectos en la Legislatura en relación a los trapitos. Uno plantea prohibirlos (Pro) y otro regularlos (FpV), ¿cuál es su posición?
–No siempre es blanco o negro. El problema de los trapitos es un problema puntual que no involucra a toda la Ciudad, se da en grandes eventos deportivos o artísticos y en algunas zonas comerciales ligadas a salidas nocturnas o gastronómicas. Eso hay que tenerlo en cuenta a la hora de abordarlo. Hoy la regulación está en el Código de Contravención, lo que pasa es que no hay capacidad del Estado para llevar a la práctica las sanciones. Sobre la idea de prohibirlo, además del atisbo de inconstitucionalidad que surge, dudamos de la capacidad del Estado de poder ejercer después ese poder de prohibición. Hay muchas variables a tener en cuenta, los dos proyectos presentan visiones antagónicas y en el medio hay mucho para analizar.
–¿Podría haber desde Unen un proyecto propio sobre el tema?
–Estamos analizándolo. Puede ser que tengamos nuestro propio proyecto, no lo hemos resuelto, recién esto se ha empezando a discutir en las comisiones.
–¿Cuáles son las iniciativas que ya presentaron o están en la agenda inmediata del espacio?
–Presentamos un proyecto para ejercer el control online del juego. Eso es un tema prioritario. El Gobierno porteño y los vecinos pierden millones por día por no gravar el juego como deberíamos y por no ejercer un control transparente. También hay proyectos en educación, que nos parece uno de los flancos más débiles de este gobierno. Presenté un pedido de informes por obras de infraestructura que el Gobierno de la Ciudad anunció y que al día de hoy, según relevamientos nuestros, no están en funcionamiento. También presenté un proyecto para ampliar la cobertura de la tarjeta SUBE a todo el transporte de la Ciudad.
–Cuando se habla de armados electorales siempre surge el apellido Nosiglia pero no por usted sino por su padre, Enrique “Coti” Nosiglia. ¿Cómo es la relación que tienen entre ustedes, en términos políticos?
–Él es un dirigente del radicalismo de la Capital que hace mucho que no ocupa ningún cargo en la dirección del partido. Es una referencia de consulta en determinados momentos y en algunos aspectos, porque es un dirigente con mucha experiencia y conocimiento acerca de la política nacional y de la Ciudad. Cuando nos juntamos hablamos de política. Pero no siempre. Lo consulto ocasionalmente.
–¿Puertas adentro de la UCR continúa manteniendo el peso histórico que supo tener?
–Eso no lo puedo decir yo, para mí es muy difícil decir eso porque es mi padre.
–¿Cómo es el presente de la UCR porteña en términos políticos?
–Hay un acuerdo de sectores mayoritarios de recuperar un radicalismo con vocación de poder, de dar espacio a los jóvenes, y de continuar en la integración de espacios como Unen.
–Gustavo Vera (Verde Alameda en Unen) dijo que “el interbloque no discute las políticas más generales”, ¿es así?
–Hemos tenido reuniones de interbloque desde que asumimos, y en muchas participó él o su secretario parlamentario o asesores. Estamos funcionado bien como interbloque, aunque seguro haya mucho para mejorar, pero que tiene que ver con la cultura política. La gran diferencia de este espacio es que si hay diferencias se debaten, se discuten. En otros espacios, simplemente, los liderazgos resuelven. Y eso no es lo que queremos: creemos en coaliciones democráticas, diversas y horizontales.