La Presidenta se pronunció desde el Monumento a la Bandera en Rosario y desde allí emitió un mensaje en conmemoración por la fecha, evocando al general Manuel Belgrano.
Acompañada por el vicepresidente Amado Boudou, imputado en el caso Ciccone, gobernadores y miembros de su Gobierno, Cristina Kirchner no dejó pasar en alto la situación del país frente a la deuda y los fondos buitres. “Hoy es un 20 de junio especial, no sólo por la circunstancia sino también porque el mundo está dado vueltas“.
“Los que siempre nos señalaron como imprevisibles, arrebatados, son los que precisamente tienen ya hace bastante tiempo el mundo patas para arriba“.
“Tengo la obligación de negociar. Soy responsable y quiero actuar en el marco de las leyes”.
Asimismo, expresó que “desde 2005 hemos venido pagando religiosamente, sin acceso al mercado de capitales, cumpliendo cada uno de los vencimientos de la deuda y pagándole al BID y al Banco Mundial“.
La Jefa del Estado recordó que también se han concluido las negociaciones con el Club de París y con Repsol.
En esa misma línea, se refirió a la postura estadounidense frente a este problema y afirmó que “escriben cosas sobre mí que después se terminan creyendo”.
En otro pasaje de su discurso hizo revisionismo histórico y recordó el inicio de la década kirchnerista y el mensaje de su marido anunciando que “vamos a pagar la deuda”. Asimismo, rememoró la frase “los muertos no pagan”.
Luego, se refirió a la situación en Europa y la deuda de varios países, lo que derivó en lo que ocurre en la Argentina. “El camino es reclamar por la democracia”, consideró.
Y agregó: “Tarde o temprano los colonialismos caen“.
