Luego de que la presidente Cristina Kirchner anunciara que la Argentina va a negociar con los holdouts que demandaron al país por la deuda incumplida desde 2001, los activos argentinos, como acciones y títulos públicos, muestran una pronunciada tendencia alcista. A la par, el dólar libre recortó gran parte del terreno ganado la semana pasada y se negocia con una caída de 55 centavos o 4,4%, hasta los 11,90 pesos.
El dólar oficial se mantuvo a $8,20 para la venta, según el promedio de bancos y casas de cambio que releva e informa el Banco Central. Así, la brecha entre ambas cotizaciones se redujo a 45,1 por ciento.
El dólar paralelo retrocede en una rueda con mayoría de alzas para las acciones líderes y los títulos públicos denominados en divisas, mientras que los agentes de la plaza financiera estiman que el giro en la estrategia oficial respecto de los bonistas que litigaron en los EEUU quitará presión en la disputa judicial entre el Gobierno y fondos de cobertura.
El dólar informal, que registró un máximo histórico de 13,10 pesos a fines de enero, anotó la semana pasada una ganancia de 6,1%, a partir de que la Corte Suprema estadounidense rechazó una apelación argentina en un juicio que el país mantiene contra holdouts por bonos impagos desde 2002.
La Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC), entidades que representan un tercio de las exportaciones argentinas, informaron que las empresas del agro liquidaron la suma de 451,4 millones de dólares. Asimismo, el monto liquidado desde comienzos de año hasta el 19 de Junio asciende a 12.345,1 millones de dólares.
Por su parte, el dólar en la plaza interbancaria o mayorista, donde el Banco Central regula la liquidez de la plaza, se situó en 8,1325 pesos.
El dólar “contado con liquidación”, que se fija al dividir los precios de los activos argentinos por su cotización en dólares en el exterior, promedia $10,36 entre acciones ($9,97) y bonos ($10,75).