Le prepararon un mullido sillón blanco, hermosas flores y un clima relajado de amabilidad, casi festivo. Los jóvenes y no tan jóvenes de Pro, reunidos en el grupo Generación de Argentina Política (GAP), recibieron -este lunes- en un colmado salón de Puerto Madero a Elisa Carrió, líder de UNEN y una de las dirigentes que promueven una “amplia alianza” electoral que incluya a Mauricio Macri.
Los integrantes de GAP, que según pudo saberse tuvieron algún roce con dirigentes de la primera plana macrista por la convocatoria a Carrió, disfrutaron de los dardos que disparó la diputada, sobre todo dirigidos hacia el ex intendente de Tigre Sergio Massa. “Si quedás embarazada de Massa, nace un Kirchner”, fue una de las frases más festejadas por la platea, unos 150 jóvenes de saco y sin corbata que colmaron un salón a media luz y se mezclaron con diputados como Federico Sturzenegger y Pablo Tonelli (Pro), Fernando Sánchez y Maximiliano Ferraro (UNEN).
Según asistentes a la reunión, las referencias a Massa, a quien definió como “delincuente”, fueron constantes. “Tuve taquicardia y lloré, porque yo a Adrián lo quiero. Pero si vuelve lo perdonaría”, contó en tono intimista en relación con la ida de Adrián Pérez (uno de sus “hijos políticos”) al massismo, antes de las elecciones de agosto pasado.
Carrió dio muestras de amplitud política. “A mí me gusta abrazarme con todo el mundo”, dijo durante una parte de la charla con los jóvenes macristas, y afirmó que con Pro “si bien hay muchas cosas que no me cierran, voy a bancar” una eventual confluencia. Los jóvenes Pro sonrieron satisfechos.