Tras el fracaso de las negociaciones con los holdouts, el ministro de Economía Axel Kicillof brindaba esta tarde una conferencia de prensa en la que volvió a negar que Argentina haya entrado en cesación de pagos. “Decir que entramos en default es una pavada atómica”, dijo.
El funcionario reiteró que la Argentina no se encuentra en default al ratificar en varias oportunidades que eso no es así porque “la Argentina pagó” a los bonistas reestructurados y fue el juez Thomas Griesa quien “detuvo” el pago. “Hay intención de desinformar”, señaló.
El ministro dijo que para llegar a ese estado deben cumplirse algunas de las condiciones fijadas en los contratos “y ninguna se cumple en esta fecha”: el no pago, el incumplimiento de otras obligaciones, el incumplimiento cruzado o “cross default”, la moratoria o que el deudor objete la validez de los títulos públicos.
“El default no es una opinión o una sensación térmica, es una cuestión estrictamente legal”, indicó.
Por otro lado, Kicillof manifestó sus aspiraciones a que el conflicto con los fondos buitre concluya “antes” del próximo vencimiento de deuda, al referirse al vencimiento del bono Par el 30 de setiembre.
El funcionario manifestó su esperanza en que la Justicia de Estados Unidos “entre en razones” y que autorice el pago a los bonistas que están retenidos desde el 26 de junio en el Bank of New York.
Además, reiteró sus críticas al mediador judicial Daniel Pollack y sostuvo que el comunicado que dio a conocer el miércoles es “digno de los fondos buitre”. Kicillof sostuvo que el mediador “ni siquiera sabe qué es el Mercosur”.
“Quiero decirle a los argentinos que los fantasmas del 2001, cuando uno levanta la sábana, abajo están los monstruos que crearon la crisis” de ese año, graficó.