Aunque parezca casual, sorpresivo y hasta un tanto curioso Independiente no acató el paro y se entrenó con normalidad. Sí, el club donde Hugo Moyano es presidente no se adhirió a la huelga que su nuevo conductor organizó y le dio la espalda a la medida. El plantel del Rojo realizó un ensayo de fútbol como todas las mañanas y se pone a punto para enfrentar el domingo a Racing, en el clásico de Avellaneda.
Después de la agónica victoria frente a Olimpo, en Bahía Blanca, el equipo que dirige Jorge Almirón busca llegar de la mejor manera al partido del semestre, aunque eso signifique hacer oídos sordos a la medida que impulsó su flamante presidente, Hugo Moyano.
Además, como si esto no fuera suficiente, en el Estadio Libertadores de América, que el domingo a las 15.15 será el escenario para un nuevo clásico de Avellaneda, continúan los trabajos en las Platea Alta que lleva el nombre de Ricardo Bochini.
De la vereda de enfrente, en Racing, primero habían decidido sumarse a la medida de fuerza y no entrenar. Pero luego al enterarse que Independiente iba a tener un día normal levantaron la medida y desde el Departamento de Prensa, sostuvieron: “Finalmente habrá práctica porque las condiciones del paro general permiten que se realice el ensayo”.