Unos 780.000 afiliados en condición de votar están llamados a elegir las nuevas autoridades del Comité Provincia este domingo, en una jornada en la que se juega la presidencia el diputado Ricardo Alfonsín ante el histórico dirigente Daniel Salvador, apoyado por un frente articulado por Leopoldo Moreau, una especie de oveja negra para muchos por su acercamiento al kirchnerismo pero que aún mantiene control de parte considerable del aparato.
A pesar de ser la jurisdicción con la mayor cantidad de afiliados radicales de todo el país, fuentes de la UCR reconocían a Noticias Urbanas que “un 75% del padrón (confeccionado por la Justicia en 2009) no sabe de la elección”.
Además de las autoridades provinciales se eligen los jefes y consejeros de los 135 distritos bonaerenses. En casi todos hubo acuerdo para listas de consenso excepto en 24, donde también se dirimirá con una interna. Muchos de esos 24 son los municipios más poblados de la Provincia: La Matanza, La Plata, Lomas de Zamora, Almirante Brown, Florencio Varela, Vicente López y Luján.
Desde el MoReNa -la línea interna que encabezan hace años Alfonsín y su mano derecha, el diputado Miguel Bazze- informaron a Noticias Urbanas que según los sondeos que manejan estarían “con el triunfo casi garantizado” pero el peligro radica en que la elección no es obligatoria y si la participación de afiliados es baja eso favorece al aparato, es decir, al poder de convocatoria.
En donde Moreau es más fuerte por su trayectoria política es en la Primera Sección (a pesar que sectores del possismo están ayudando a Alfonsín). Por lo bajo y en discreción admiten que Moreau (quien se acercó al gobierno nacional tras perder las internas en 2010) “maneja muchos contratos en varias administraciones, y eso lo favorece para traccionar votos”.
Durante una entrevista con Noticias Urbanas, Alfonsín advirtió que si ganara el tandem Salvador-Moreau “habría en el Comité una dirigencia con mirada condescendiente, complaciente con el kirchnerismo, una mirada que se silencia ante cosas que nunca puede dejar de denunciar un radical, como lo que hace el Gobierno con las provincias, o temas relacionados a la corrupción”.
En cuanto a la repercusión nacional, no habría muchos cambios: tanto el MoReNa como el sector de Moreau comparten la oposición a una posible alianza con Mauricio Macri a nivel nacional y provincial. Sin embargo, un triunfo del aparato mas añejo de la política provincial debilitaría a Alfonsín como interlocutor ante los que sí proponen el acuerdo electoral con el Pro (como Ernesto Sanz y Oscar Aguad).
Además, el resultado traerá consecuencias al momento de decidir orgánicamente las alianzas de la UCR bonaerense de cara a 2015 y el impulso (hasta ahora descontado) a la precandidatura de Bazze. Este domingo se develará el misterio.