El líder de la agrupación MILES y de la Federación Tierra, Vivienda y Habitat (FTV), Luis D’Elía, quedó más cerca de un juicio oral por los incidentes provocados durante la primera protesta grande en la Plaza de Mayo contra el Gobierno en medio del conflicto con el campo, seis años atrás.
La Cámara Federal confirmó este lunes el procesamiento que había dictado en su contra el juez federal Julián Ercolini por el delito de “intimidación pública”, castigado con hasta seis años de cárcel. Los propios camaristas recordaron en su resolución que el dirigente piquetero ya fue condenado a cuatro días de prisión en suspenso por agredir ese mismo día al productor rural Alejandro Gahan y provocarle lesiones leves.
La intimidación achacada a D’Elía ocurrió el 25 de marzo de 2008, cuando grupos afines al Gobierno acudieron a la Plaza de Mayo con la intención de disolver una manifestación importante contra el Gobierno por el aumento de las retenciones a las exportaciones de oleaginosas. La famosa resolución 125 luego rechazada por el Senado con el voto del por entonces vicepresidente Julio Cobos.
Al igual que el juez Ercolini, los camaristas Martín Irurzun, Horacio Cattani y Eduardo Farah sostuvieron que D’Elía, “a través de amenazas y agresiones, generó a sabiendas temor, tumultos y desórdenes, característicos de la figura del artículo 211 del Código Penal con el propósito, finalmente logrado, de que otros desistiera de su protesta -vinculada a un asunto de índole pública- contra su voluntad”.
Como D’Elía dijo en la causa que ese día actuó de la manera en que lo hizo en “salvaguarda de la democracia”, los camaristas le respondieron que, “si de amparar la Constitución se trata, no puede desconocerse la vinculación del caso con los derechos a la libre expresión, de reunión y de peticionar a las autoridades”. Y añadieron: “Justamente, su ejercicio se vio afectado por las acciones del imputado” en este caso.
En la causa se tuvieron en cuenta las declaraciones de varios testigos que participaban de la manifestación abortada por los simpatizantes kirchneristas -entre ellos el propio productor rural lesionado por D’Elía- sino también grabaciones de canales de televisión en las que se lo escucha gritar contra “la puta oligarquía”.