El subsecretario de Trabajo, Industria y Comercio del Gobierno de la Ciudad dialogó con Noticias Urbanas sobre el conflicto. El funcionario fue el encargado de juntar a todas las partes para hallar una solución. Sin embargo, cree que el conflicto crecerá.
–¿Cómo analiza el conflicto en el subte?
–Nosotros vemos que el conflicto varía. Por un lado está la UTA, y por el otro, los metrodelegados. Y para posicionarse de una mejor manera frente a la UTA, los metrodelegados realizan acciones más fuertes. Después existe un conflicto interno entre los metrodelegados, porque no se manejan verticalmente sino de una manera horizontal y eso hace que tengan conflictos entre ellos. Muchas veces los delegados de una línea toman decisiones sin consultar a la cúpula del gremio. Y todos estos elementos hacen que la solución del conflicto sea más compleja. Porque las causas son múltiples.
–¿Cómo evalúa la posición de Metrovías?
–Metrovías tiene la posición de hacer que el servicio sea más eficiente. Entonces, cualquier tipo de inconveniente gremial que surja produce un conflicto que va en contra de sus intereses. Pero la concesionaria siempre estuvo dispuesta a concurrir a todas las reuniones que se realizaron en la Subsecretaría de Trabajo porteña, donde tratamos de llegar a una solución.
–Entonces, ¿usted cree que todo se debe a una interna gremial?
–Hay una interna muy importante, que es la pelea entre los metrodelegados y la UTA. Y esto está claro, porque el conflicto pasó del Ministerio de Trabajo de la Nación a un ámbito mucho más político, que es el de la Jefatura de Gabinete de la Nación. Hace dos semanas, los metrodelegados se reunieron con el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, y con el diputado nacional y secretario general de La Cámpora, Andrés “Cuervo” Larroque, para tratar de resolver el tema de la pelea con UTA. En eso se comprometieron Capitanich y Larroque ante los metrodelegados. Con base en esos datos, nosotros esperamos que el conflicto aumente, porque viró de lo sindical a lo político.
–Frente a este escenario, ¿cuál es la posición de la Ciudad?
–Evitar cualquier conflicto que perjudique a los usuarios del subte. Poniéndoles límites a las medidas de acción gremial. Nosotros creemos claramente que la Nación tiene injerencia en el conflicto intersindical. Y creo que Capitanich y Larroque se meten en el conflicto para perjudicar a la gestión del Pro.