Los terrenos de la Avenida Eduardo Madero 901, 1051 y 1251 habían sido otorgados a la Asociación de Lucha contra el Analfabetismo (ALCA) cuyo domicilio declarado pertenece a una casa de familia. Según la denuncia efectuada al Gobierno de la Ciudad por la Cámara de Garajes y Estacionamientos (AGES), antes de que fueran entregadas a ALCA, los estacionamientos habían sido cedidos a dos sociedades comerciales: Construcciones Portuarias New Port SA y Sadagro SA. Pero existía una tercera sociedad de hecho, de la que formaban parte un encumbrado funcionario del Consejo de la Magistratura porteño (a cargo del Presupuesto del Poder Judicial de la Ciudad), Norberto Urfeig y su hermano Ricardo. Curiosamente, y a pesar de las sucesivas clausuras dispuestas, la playa continuó en actividad hasta que se dispuso su cierre definitivo. El Gobierno de la Ciudad se encuentra investigando ahora el alcance de la anomalía detectada, para tomar las sanciones que correspondan
10 June, 2001 | 0:00