El intendente de San Isidro, Gustavo Posse, pegó el portazo este verano y decidió abandonar el Frente Renovador luego de varios meses de dejar trascender sus quejas con respecto al rumbo que tomaba el massismo en la Provincia, y especialmente los coqueteos con Martín Insaurralde. Aunque ahora la novela cambió de protagonistas y los vaivenes son entre él y el presidenciable del Pro, Mauricio Macri.
Es que si bien él se muestra decidido, desde Bolívar 1 aún no terminan de definir su incorporación y tampoco quieren apurarla. De hecho, ayer en declaraciones públicas al visitar Lanús, Macri dijo que “no hay nada concreto” con respecto al tema aunque admitió que “se está hablando”.
En diálogo con Noticias Urbanas, el intendente de San Isidro reiteró: “Mi meta es participar de las primarias con María Eugenia Vidal y Mauricio Macri como candidato a presidente”. Aunque con sus dichos el jefe del Pro pareció enfriar el pase, desde la cúpula del Pro mantienen diálogo con Posse y creen que su incorporación está “casi cerrada”.
De hecho, desde el possismo señalan que lo único que pidieron a cambio para aceptar fue que Macri no les designe a su candidato a vicegobernador. Esperan en la primaria pero colgado de la boleta de Macri y no, como el vidalismo preferiría, de la de Ernesto Sanz o Julio Cobos (a quienes descuentan participando de las PASO en agosto con Macri). Todo parece indicar que imperará la primera opción porque es la que más favorece la tracción de votos para el premio mayor.
Al consultarle sobre su ex aliado de Tigre, Posse es respetuoso y justifica su partida por las “cosas en las que no coincidía o no participaba”. De hecho, a mediados de enero casi dinamitó su estadía en el Frente Renovador al elogiar a través de los diarios a Macri y volver a pedir una gran interna con Massa.
“Conmigo vienen listas enteras del Frente Renovador y de la UCR. Todo lo que juntamos con Macri es lo que perdió Massa”, señaló, en alusión a que el triunfo electoral de 2013 por parte del tigrense tenía incluido un porcentaje de electorado macrista que ahora se desmarcará, junto con parte del aparato que venía aglutinando Posse y que ahora también deja el barco massista.
El intendente asegura que sectores del radicalismo que se habían volcado a participar en el massismo se han ido con él y se sumarán al Pro, en distritos como Almirante Brown, Esteban Echeverría, General Rodríguez y Luján.
Mientras tanto, Posse aguarda con expectativa la convención nacional de la UCR el próximo sábado, en la que su aliado táctico, Ernesto Sanz, intentará imponer su voluntad y llevar al partido a un frente electoral con el macrismo.
